Rafa Latorre asegura en Más de uno que "Waterloo es una tormenta de ideas porque Puigdemont va a lanzar una nueva marca electoral". considera que "lo que revela es una sincera vocación independentista, que le ha llevado a independizarse ya de cualquier instancia que lo cobije y cuya culminación sería la independencia de sí mismo, que tal cosa es el delirio".
Además, recuerda que el procés cumplió con puntualidad aquella profecía aznarista de que "antes que España, se rompería Cataluña". Y comenta que "le faltó añadir que lo siguiente en romperse sería el propio independentismo y finalmente el independentismo convergente, que a estas alturas ya podría montar su propia internacional".
Y concluye explicando que "el mesianismo de Puigdemont es delirante, irracional, incluso ridículo" pero que "también es extraordinariamente tenaz".