El pasado viernes, el Gabinete de 'Julia en la Onda' albergó un interesante debate acerca de las implicaciones éticas de una técnica médica revolucionaria: el 5 de octubre de 2020, un equipo del Hospital Clínic de Barcelona consiguió, por primera vez en España, trasplantar un útero humano con éxito. A esta operación, realizada hace ya cuatro años, le siguió una segunda intervención también exitosa, pues en ambos casos las mujeres que recibieron los trasplantes han podido cumplir su deseo de ser madres.
"Nuestro objetivo es conseguir un embarazo. No es conseguir tener la regla", ha declarado en 'Julia en la Onda' el doctor Francisco Carmona, jefe de Ginecología y Obstetricia del Hospital Clínic y uno de los responsables del éxito de estos trasplantes tan difíciles de realizar. En su entrevista con Julia Otero, Carmona ha detallado que la intervención ocupa más de 10 horas trabajo minucioso, pues hay que conectar un delicado y complejo sistema de vasos sanguíneo que permita conectar el útero donado en el cuerpo de la paciente. En el programa, el doctor también ha resuelto algunas dudas acerca de esta operación, no exenta de una cierta polémica en el mundo médico.
¿Se ha tenido en consideración el aspecto ético de este trasplante?
En primer lugar, el doctor Carmona ha asegurado que, al plantear llevar a cabo esta intervención, se envió un primer documento al comité de ética del hospital, y después a otros muchos organismos de estas características. Al tratarse este trasplante de un avance que afecta a materias tan sensibles como la salud, la maternidad y el cuerpo, Carmona asegura que la discusión sobre límite de los avances técnicos configura "un debate que debe realizar en la sociedad".
La donación de útero, en la cual una mujer viva cede esta parte de su cuerpo a otra mujer, ha despertado precisamente un debate acerca del propósito que deben perseguir los trasplantes: este no es un trasplante que responda a una necesidad vital, pues tiene el único objetivo de suplir el deseo de una mujer que quiere ser madre.
Carmona se ha posicionado en este debate, y afirma que, por ejemplo, una donación de riñones puede implicar un mayor riesgo para la vida del donante, que se queda desprotegido si sufre un fallo en el riñón que le queda: "Si pierde el útero, solo implica que la mujer se queda sin la posibilidad de gestar", asegura el médico.
¿Qué consecuencias tiene donar un útero?
Carmona ha explicado en el programa que una mujer que dona su útero a otra persona solo pierde la posibilidad de gestar un hijo en su interior, y también deja de menstruar. Sin embargo, los ovarios se mantienen intactos, y el funcionamiento hormonal de la mujer donante no se ve alterado. Por lo tanto, la donación del útero - explica el doctor- no supone una entrada inmediata en la menopausia: existe una cierta discusión científica sobre la posibilidad de que la donación del útero pueda adelantar la llegada de la menopausia, si bien el profesor indica que los ovarios siguen actuando igual hasta el final de su ciclo de funcionamiento.
¿Podrían comprarse y venderse úteros humanos?
Al concebirse esta operación como una donación voluntaria entre personas vivas, muchas personas temen que su popularización pueda generar un mercado de úteros, en el que mujeres estén dispuestas a vender sus úteros a cambio de grandes cantidades de dinero. El jefe de Ginecología del Clínic indica que, entre personas vivas, "en España no está permitida la donación anónima", y que se ha desarrolado un sistema muy estricto para asegurar que existe una relación de amistad genuina que justifique la donación de un órgano a una persona cercana.
"El sistema es muy garantista", afirma Carmona, que describe cómo cualquier persona implicada en una donación de estas características tiene que pasar por varias entrevistas con el comité ético del hospital y con los médicos, y que el juez debe ratificar que no existe la más mínima duda de la ausencia del ánimo de lucro en la donación. El médico explica que, en su hospital, todos los médicos conocen casos en los que no se han llevado a cabo trasplantes al no existir las certezas necesarias.
"En nuestro protocolo exigimos que sean madre o hermana", ha afirmado el médico, que en los dos trasplantes que ha realizado junto a su equipo ha optado por esta condición para garantizar la compatibilidad.
¿Un útero trasplantado de una mujer con la menopausia puede gestar tras ser traslaptando?
El jefe de Ginecología asegura que es posible: "El útero no envejece al ritmo que envejecen los ovarios", detalla Carmona, que asegura que un útero trasplantado en un cuerpo con ovarios activos puede ser estimulado con hormonas para que cumpla con su función de gestar un bebé.
¿El útero trasplantado es para toda la vida?
Francisco Carmona ha indicado en varias ocasiones durante la entrevista que el objetivo de esta intervención es cumplir el deseo de la madre de ser madre. Por ello, el útero se retira quirúrgicamente después de que la mujer haya dado a luz a las criaturas que desee tener. El motivo de esta intervención es evitar que la portadora del útero trasplantado tenga que tomar inmunodepresivos durante toda su vida para combatir el rechazo que el cuerpo ejerce frente a los órganos trasplantados.
Con este método, ¿una mujer trans podría llegar a gestar?
Al final de la entrevista, el médico ha sido preguntado acerca de la posibilidad de trasplantar un útero hacia una mujer con cromosomas XY, una mujer trans nacida con genitales masculinos. Al no contar estas personas con ovarios, el médico afirma que, si bien se puede trasplantar el útero, mantener el embarazo puede ser tremendamente difícil. Sin embargo, el doctor no descarta que en un futuro se pueda llegar a conseguir: "Cuando yo empezaba en la medicina, era ciencia ficción lo de hoy", ha concluido el doctor Francisco Carmona.