La apuesta del líder del grupo parlamentario del Partido Popular Europeo (PPE), Manfred Weber, por buscar una "solución final para la cuestión de los refugiados", expresión con reminiscencias nazis, ha suscitado una importante polémica en Alemania, a pesar de las explicaciones del político.
Weber pronunció esas palabras en una convención de su partido, la Unión Socialcristiana de Baviera (CSU), hermanada con los cristianodemócratas de la canciller, Angela Merkel, y las recogen los principales medios del país, mientras se mantiene un encendido debate en las redes sociales.
Weber, miembro de la CSU, aseguró en la convención que "en el año 2018 el tema europeo central es la solución final para la cuestión de los refugiados", términos que recuerdan a la "solución final para la cuestión judía" del régimen nazi. Según sus palabras, difundidas tarde por la radiotelevisión pública bávara, "se necesitan respuestas legislativas a nivel europeo" y si se quiere buscar una solución "los interlocutores principales" deben ser los países centroeuropeos y el primer ministro húngaro, Viktor Orbán, invitado a la convención bávara.
Ante el escándalo suscitado, Weber aseguró a través de Twitter que la "deliberada malinterpretación" de su declaración era una "completa tontería", ya que su objetivo era dejar claro que "en 2018 se necesita una solución europea conjunta en el sentido de ayudar a las personas necesitadas".
Entre las críticas en las redes, destacó la defensa de Weber por parte del líder del partido ultraderechista Alternativa para Alemania (AfD) Jörg Meuthen, quien aprovechó la ocasión para cargar contra los medios que atacan a su partido cuando usa terminología con connotaciones nazis.
"Nadie piensa en serio que Manfred Weber es un nazi encubierto. Claramente no es el caso. Pero las reacciones mediáticas son muy reveladoras. No hay nada más que los omnipresentes ataques con el tema nazi", señaló en su cuenta de Twitter.