Hoy lección de psicología en el Congreso. En este capítulo hablamos de "acción en epejo". En su intervención en el Congreso, Alberto Núñez Feijóo ha arremetido contra el Ejecutivo y en particular contra Pedro Sánchez. Ha recalcado que la situación del fiscal general es "inédita en democracia" y ha subrayado que "no puede perseguir delitos quien presuntamente los ha cometido".
A su entender, Sánchez "debe de exigirle la dimisión y si no lo hace debe de hacer uso del Estatuto del Ministerio Fiscal y cesarle por grave incumplimiento de sus funciones". Por eso, le ha preguntado expresamente: "¿Va a cesar al fiscal general del Estado o considera como su ministro de Transportes que el Tribunal Supremo trabaja para mí?".
La respuesta psicológica de Sánchez
Entonces, el presidente del Gobierno ha criticado que Feijóo haga lo que en psicología se llama "acción en espejo", que consiste en "reprochar al contrario lo que uno hace y el otro no".
"El señor Feijóo me dice que soy un capo, con el álbum de fotos que tiene. El señor Feijóo habla de corrupción cuando se puso al frente del PP para tapar la corrupción de la señora Ayuso. El señor Feijóo habla de falta de democracia y lleva dos años sin reconocer el resultado electoral de las últimas generales".
Además, ha criticado que Feijóo hable de "desgobierno" pero luego traslade a Mazón su "buen trabajo". "Eso no solamente es faltar a la verdad, señor Feijóo, es faltar al respeto a las víctimas de la Gana. Usted lo que hace es un selfie cuando hace esa acción de espejo", ha finalizado.
¿Qué es la “acción en espejo” de la que habla Pedro Sánchez?
Durante la sesión de control al Gobierno celebrada este miércoles en el Congreso de los Diputados, Pedro Sánchez ha recurrido a un término psicológico poco habitual en el debate político: la “acción en espejo”.
En psicología, la acción en espejo, más conocida en el ámbito clínico como proyección psicológica o mecanismo de defensa proyectivo, consiste en atribuir a otros los propios defectos, comportamientos o intenciones. Es decir, alguien acusa a otra persona de hacer precisamente lo que él mismo hace o ha hecho. Este mecanismo, que puede ser inconsciente, permite al sujeto librarse del conflicto interno que le genera su propia conducta.
En un plano más cotidiano y discursivo, también se usa para describir un fenómeno comunicacional en el que un interlocutor acusa a su oponente de algo que, en realidad, él mismo ha practicado o de lo que no tiene autoridad moral para hablar, lo que convierte su crítica en una especie de reflejo especular, de ahí el término “espejo”.
