El Boletín Oficial del Estado ha publicado esta mañana norma por la que se eliminan las mascarillas en interiores, con carácter general, excepto, recuerden, en casos como los centros sanitarios, residencias y el transporte público. En la empresa privada son los servicios de prevención los que están marcando las directrices. En este sentido la aplicación de la norma no está siendo uniforme, según cuenta el secretario general de la patronal CREEX, Javier Peinado, quien explica que hay de todo. Trabajadores que siguen con las mascarillas y otros lugares de trabajo con una casuística concreta donde se están haciendo recomendaciones hasta que los servicios de prevención determinen si hay que usar o no mascarillas. Por otro lado, la Consejería de Educación ya ha remitido un protocolo con la relajación de las medidas, que además del fin de las mascarillas, permite recreos sin separación y actividades como excursiones y graduaciones.
CONSEJERÍA DE SANIDAD Y SERVICIOS SOCIALES.
Por su parte, el consejero de Sanidad, José María Vergeles, ha hecho un llamamiento a la responsabilidad individual de cada ciudadano. En redes sociales, Vergeles expresa que lo más importante es que "eliminar el uso obligatorio de la mascarilla, no es obligar a quitársela". Para ello recurre al "sentido común", de modo que hay que "reflexionar" sobre su uso en casos de aglomeraciones, interiores mal ventilados, cuando se pase "mucho tiempo" en un interior sin distancias de seguridad o con presencia de personas vulnerables.
Por último, y en relación a la situación epidemiológica en la que se encuentra Extremadura con la llegada de este cambio, señala que está en nivel de riesgo 1, que es "el más bajo antes de la ausencia de riesgo".
