La Guardia Civil ha instruido diligencias como investigado a un vecino de Badajoz como presunto autor de un delito contra la flora y fauna, al intervenirle trampas para cazar animales de forma ilegal en una finca de la localidad pacense de Montemolín.
A mediados del pasado mes de marzo, agentes del Seprona de la Guardia Civil de Fuente de Cantos que realizaban servicio para prevenir la caza furtiva localizaron en un coto deportivo de caza en Montemolín dos lazos desactivados junto a una jaula vacía de las comúnmente conocidas para el uso con reclamo.
Así, ante las sospechas de que se estuvieran llevando a cabo acciones delictivas con el uso de métodos ilícitos para la captura de animales, se inspeccionó de manera exhaustiva el terreno y aledaños al cortijo.
Fue en una nave anexa a este inmueble, donde hallaron un cepo metálico activado próximo a una jaula trampa que contenía en su interior a modo de cebo un trozo de embutido, supuestamente con el objetivo de atraer y capturar animales silvestres, ha destacado la Guardia Civil en nota de prensa.
Con las gestiones practicadas durante el transcurso de la investigación, los agentes pudieron identificar al responsable de su instalación, quien era el titular de la finca y que supuestamente pretendía apresar las alimañas que causaban daños en su propiedad.
El hecho de cazar o capturar especies silvestres sin estar legalmente autorizado con este tipo de artes prohibidas (jaulas trampas y cepos), consideradas de carácter no selectivo por afectar indiscriminadamente a distintas especies, puede ser constitutivo de un delito contra la fauna.
Ante las pruebas incriminatorias, el pasado fin de semana se le instruyó diligencias que han sido entregadas en el Juzgado de Instrucción de Zafra.