El Ayuntamiento y la Universitat de València (UV) han puesto en marcha un concurso de ideas para diseñar el ajardinamiento del campus de Tarongers. La institución académica tiene previsto invertir 1,4 millones de euros para “eliminar cemento” y hacer más atractivo este entorno de más de 95.000 metros cuadrados, de los que 52.000 son espacios públicos.
La intención del proyecto es conseguir una mejora paisajista del campus mediante el empleo de arbolado o praderas vegetales, creando zonas de estancia y un área para eventos al aire libre frente a la biblioteca Gregorio Mayans. El concejal de ecología urbana, Sergi Campillo, ha señalado que el objetivo es “humanizar” un entorno construido en los años 90 del siglo pasado y cuyo diseño ya ha quedado obsoleto:
Campillo ha añadido que se trata de un proyecto “ilusionante para toda la ciudad”, que va en la línea de las actuaciones de “renaturalización” que el Ayuntamiento está impulsando en otros entornos de la ciudad. El plazo de presentación de solicitudes para participar en el concurso acaba el próximo 10 de mayo.
A través de este concurso de ideas un jurado integrado por representantes del Ayuntamiento y de la Universitat elegirá cinco proyectos finalistas, según ha explicado el vicerrector de infraestructuras de la UV, Justo Herrera. Esas cinco propuestas se expondrán públicamente y después se someterán a votación entre la comunidad universitaria el próximo mes de septiembre.
El ganador recibirá un premio de 8.000 euros y también habrá recompensa económica para los otros cuatro finalistas. La previsión de la Universitat de València es que las obras puedan comenzar a ejecutarse el año que viene.
