LICITACIÓN

Polémica en la Vila Joiosa por no haberse licitado ya los chiringuitos de la playa

El PP de La Vila Joiosa lanza duras críticas al PSOE por la tardanza en adjudicar los chiringuitos de las playas y le acusa de estar más ocupado de la sucesión del alcalde que de los asuntos ciudadanos. Por su parte, el PSOE responde que el retraso se debe a que se ha cambiado el pliego de licitación par obtener un mayor beneficio medioambiental, pero que la licitación es inminente

Antonio García Sancho

Marina Baixa | 09.03.2022 14:42

“El PSOE no ha aprendido nada en estos últimos 7 años de gobierno”, así de taxativo se ha mostrado el portavoz del PP en la Vila, Jaime Lloret, refiriéndose a la falta de salida a licitación del nuevo contrato de los chiringuitos en La Vila Joiosa.

La frase arranca un comunicado en que Jaime Lloret llama abiertamente “incompetentes” a los miembros del PSOE en materia de gestión municipal. Lloret explica que "el servicio de chiringuitos se debería iniciar, como cada año, el 15 de abril, para llegar al 15 de septiembre" pero con el retraso en la licitación, el portavoz popular duda mucho que puedan cumplirse estos plazos, "con la consiguiente pérdida de beneficios que supone esto para los titulares de esos chiringuitos, durante el tiempo en que estén inactivos". Lloret afirma que esta forma de gestionar "no es una excepción" y recuerda que "los servicios de jardinería, la limpieza de edificios o el transporte urbano también están dándose sin contrato". Para el líder del PP la explicación es "en el PSOE no se ocupan de esto porque están enzarzados en una guerra interna por la sucesión de Andreu Verdú".

Sin embargo, en el equipo de gobierno aseguran que la explicación es más sencilla. "El pliego está ya concluido y a punto de licitarse. Sólo se ha retrasado porque se ha estado modificando para mejorarlo y obtener mayores ventajas en el tratamiento del entorno y el cuidado del medioambiente, dado la zona en que se instalan" asegura la edil de playas Marta Sellés. Insiste la edil en que se trata de "un mínimo retraso" para exigir un importante beneficio", valora Sellés.