Vila-real es una pequeña ciudad, o un gran pueblo, como se prefiera, situado en la comarca de la plana baja y a muy pocos quilómetros de la capital de la provincia, Castellón. En la actualidad, muy pocos son los que no conocen este nombre. Hablamos de un diminuto pueblo que vivía del cultivo de la naranja que creció y se convirtió en uno de los hermanos mayores de toda la provincia.
El primer impulsor no es otro que el Villarreal CF, un club fundado un 10 de Marzo de 1923 y que tantas alegrías le ha dado a sus seguidores. Además, no ha de olvidarse el fuerte empujón recibido por la industria del azulejo, que aún se mantiene como la vía que más empleo otorga a los habitantes de Vila-real.
Pero, esta pequeña ciudad es mucho más que eso. Se trata de uno de los referentes turísticos a nivel religioso. La basílica de Sant Pasqual, la Iglesia Arciprestal o la Iglesia de la Sangre, son algunos de los monumentos de visita obligada. De hecho, incluso el Rey emérito Juan Carlos I inauguró la real capilla en el año 1992.