La rectora de la Universidad de Alicante, Amparo Navarro ha manifestado hoy que 2023 ha sido un año “de buena cosecha, porque se han recogido los frutos de lo que se sembró anteriormente”. Sin embargo, los retos para este nuevo ejercicio, con las exigencias de la nueva Ley, la LOSU y la insuficiente financiación que reciben las Universidades se presenta especialmente complicado.
A pesar de todo, “se han equilibrado los presupuestos y la Universidad de Alicante asumirá el coste de la cotización a la Seguridad Social para los universitarios en prácticas”, ha precisado.
Para ello, según Amparo Navarro, han tenido que dar prioridad a determinadas partidas, en detrimento de otras, como el mantenimiento del Campus o, en lugar de implantar cuatro nuevos grados como se había previsto, en 2024; se pondrán en marcha el de Logopedia e Ingeniería Aeroespacial.
Este es el balance de Amparo Navarro quien, ha puesto en la parte positiva la vuelta del grado de Medicina, que ha supuesto que la Universidad de Alicante haya sido la primera opción para más de 1.600 alumnos, que ahora están muy satisfechos.
Plan de financiación
De otro lado, Navarro ha pedido al Consell que, cuanto antes impulse el Plan Plurianual de Financiación. Se aferra al compromiso de abordar esta cuestión a pesar de que se les ha mantenido para este año el crédito presupuestario de 2023. Un plan que no llegó a negociarse con el Botánic y que “ha supuesto un parón”, así como los meses que ha estado en funciones el Gobierno de España.
En este ámbito, Navarro también ha recordado al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, que “la nueva Ley hace partícipe al Estado en la financiación de las instituciones académicas públicas”. Por lo demás, en el balance anual, la rectora ha expresado su satisfacción por la buena evolución del Parque Científico cuyo edificio principal ya tiene cubierto el 70 por ciento por parte de empresas que quieren compartir su experiencia con la investigación universitaria.
