Los trabajadores y los delegados de UGT y CCOO en el servicio postal de Alicante, se han concentrado a las puertas del histórico edificio de Correos de Alicante para rechazar a la venta del edificio, ubicado en la plaza de Gabriel Miró, que conllevará el traslado forzoso de 75 empleados en plena campaña de Navidad.
Denuncian que con esta operación la Dirección de Correos pretende tapar en parte el enorme déficit económico provocado por la deficiente gestión del presidente de Correos Juan Manuel Serrano que acumula pérdidas económicas que superan los 800 millones de euros en la cuenta de resultados de la compañía postal desde que llego a la presidencia.
Escrito de los sindicatos
Según el comunicado de CCOO y UGT; esta venta, se hace por un valor considerado extremadamente bajo ya que cubre escasamente el valor de la reforma que se hizo recientemente en el edificio y que formo parte de un plan integral de revitalización de la zona, por lo que prácticamente el edificio se regala con el único objeto de hacer “caja a la desesperada” para maquillar las pésimas cuentas del Operador Público a las que han llevado los actuales gestores del operador.
La venta de este emblemático inmueble derivará en el traslado forzoso en plena campaña navideña, de todos los departamentos que actualmente trabajan en dicho edificio, la unidad de reparto número 1, la Oficina Principal, los servicios administrativos, los servicios comerciales y los servicios médicos, con un total de 75 trabajadores/as.
Como consecuencia, en el caso de los adscritos en la oficina principal, se van a derivar a un local con carácter provisional por solo un año, lo que comportará la búsqueda de otro local, en el centro de Alicante que sirva de sede a la oficina principal, con el gasto de alquiler y nuevas obras de acondicionamiento necesarias.
El resto de colectivo afectado será llevado a otros locales de Correos con la necesidad de acometer obras de mejora, sumando en su totalidad en cifras, este precipitado desalojo un importante desembolso económico, de más de un millón de euros y un coste organizativo de grave envergadura. A menos de un mes del traslado, como fecha tope 20 de diciembre, los locales a los que se van a llevar al personal afectado, no están acondicionados ni reúnen las condiciones mínimas de adaptación, para que sean ocupados por los trabajadores/as de Correos y para la accesibilidad, seguridad y atención a la ciudadanía.
Lo que va a generar el caos a las puertas de una campaña de Navidad, donde se verán afectados hasta 11 distritos postales de la capital. Como consecuencia del traslado y su reorganización, puede ocasionar un retraso y acumulaciones en el curso, tratamiento y entrega de la distribución postal y de paquetería, que supone un fuerte incremento en estas fechas señaladas, donde la venta on line se dispara, lo que va a producir malestar, desconfianza y perdida de fidelidad por parte de la ciudadanía Alicantina, cuando vean que sus paquetes, pueden no llegar en fechas tan señaladas.
Con la concentración de protesta antes las puertas de este edificio singular, queremos dar a conocer a la opinión pública de Alicante las consecuencias del desmantelamiento del Servicio Postal tal y como lo conocemos, como queda reflejado con la venta de este edifico emblemático por debajo de su coste real, renunciando Correos a perder su esencia y el referente de esta institución centenaria en la ciudad de Alicante.
Tanto CCOO como UGT nos hemos opuesto desde el principio a este desguace del Servicio Postal que está llevando a cabo el presidente Juan Manuel Serrano.
Exigimos la inmediata paralización de la venta de la Sede Principal de la provincia de Alicante que afectará seriamente, al conjunto de los 75 trabajadores/as, que verán afectadas sus condiciones laborales, por el traslado forzoso, circunstancia que afectará gravemente a la conciliación familiar y laboral.
