El Azorín, el Tossal y el Emilio Varela tendrán que esperar al verano que viene. Los socialistas responsabilizan al alcalde Luis Barcala, por no haber realojado temporalmente a los conserjes que viven en estos centros y que son personal municipal.
Es "aberrante que sean tres centros de Alicante los únicos de la provincia donde este verano no se ha erradicado el amianto por la negativa del alcalde a solucionarlo", ha afirmado el portavoz socialista, Paco Sanguino.
El alcalde de Alicante deberá explicar a las familias de los centros educativos -añade Sanguino- por qué se ha negado a gestionar un problema tan grave y tan sencillo de resolver; debe explicar por qué se atreve a comprometer la salud de la población escolar de estos centros un curso más, por qué sigue apoyando a su concejala cuando muestra constantemente una irracionalidad impropia de un responsable público y por qué tiene el deshonor de ser el único alcalde de la provincia que cuenta con centros "que mantendrán el amianto sobre nuestros niños y niñas durante un curso más", ha añadido Sanguino.
Los socialistas afirman que aquí "hay una causa de fondo: el bloqueo y la obstrucción al Consell a costa de la Educación Pública".
Este material peligroso sí se ha retirado del colegio Rabassa y está a punto de acabar la obra en el Gabriel Miró y San Nicolás de Bari. Los trabajos son complejos y caros; de hecho han costado algo más de un millón de euros entre los tres.
