Este martes, la Asociación de Artesanos de Pastelería de Madrid (Asempas) ha dado por inaugurada la campaña del roscón de Reyes en un acto que han celebrado en la oficina de turismo de la Puerta del Sol en el que han participado algunas de las 600 pastelerías de Madrid.
Aunque tradicionalmente se trata de un dulce que se consumía principalmente los días de las fiestas navideñas, cada vez son más las personas que adelantan a mediados de diciembre la compra de roscones. Cambia esta costumbre y cambia también alguna de las preferencias de los consumidores, que a raíz de la pandemia, vienen apostando, por unidades más pequeñas y con una menor cantidad de azúcar, para poder adaptarse a todos tipo de familias y a los gustos de los clientes.
Un postre cuyas ventas no dejan de crecer año tras año, de hecho, Asempas, estima que en esta ocasión se consumirán aproximadamente 2.800.000 unidades.
El roscón de nata compite con nuevos sabores
Aunque el roscón de nata continúa siendo el roscón de Reyes por excelencia, (más de la mitad de la población prefiere esta opción)cada vez son más los consumidores que apuestan por probar nuevos sabores, como por ejemplo el de pistacho, el de galletas oreo o el de crema de avellanas y fresa.
La subida de precios que estamos viviendo también se refleja en los roscones de Reyes que verán incrementado el precio del producto final, aproximadamente en un 10%, debido a la subida de precios de los productos principales como la mantequilla o el huevo.
