A finales del pasado mes de marzo, el Equipo de Policía Judicial de la Guardia Civil de Talavera de la Reina abrió la Operación AERIS-TA con el fin de esclarecer los distintos delitos de robo con fuerza en las cosas cometidos en municipios de la zona, donde los delincuentes sustraían el cable de cobre del alumbrado público y de telefonía, generando con ello un grave perjuicio a los consistorios y empresas afectadas, según ha informado la Guardia Civil en nota de prensa.
Estos delincuentes actuaban principalmente de madrugada, debido a las restricciones de movilidad que aún estaban en vigor, o por el día en zonas apartadas de los núcleos urbanos, para evitar ser detectados.
Para sustraer el cable fracturaban las cajas de las farolas o de las arquetas del suelo, ataban una eslinga desde el cable a un vehículo que ponían en movimiento para tirar y arrancar hasta varios cientos de metros de cable.
Seguidamente "pelaban" este material, es decir, lo quemaban para retirar el envoltorio aislante de plástico que recubría el cobre para después venderlo en distintos centros de recuperación de metales.
La Guardia Civil realizó numerosas inspecciones en este tipo de establecimientos, conocidos comúnmente como chatarrerías, donde se pudo comprobar que varias personas habían hecho entrega de importantes cantidades de cable de cobre pelado sin justificar su lícita procedencia.
En estos puntos se incautaron 188,50 kilos de cobre con un valor aproximado de 1.000 euros, del total de 1.320 kilos de cobre sustraído, que podrían alcanzar los 6.600 euros, valor que depende directamente de la Bolsa de Metales de Londres, todo ello sin contar con la valoración económica de los daños causados.
En distintas fechas, los agentes de este Equipo de Policía Judicial de la Guardia Civil tomaron manifestación, como investigadas no detenidas, a 9 personas relacionadas con estos hechos. Seis de ellos, con relación familiar y de amistad, por 10 delitos de robo cometidos en las localidades de San Bartolomé de las Abiertas, Mejorada, Pepino, Calera y Chozas, Marrupe, Alcolea de Tajo y Montearagón. Los otros 3 son los responsables de centros de reciclaje de Talavera de la Reina y han sido investigados por 19 delitos de receptación.
Las diligencias instruidas por estos hechos han sido remitidas a los Juzgados de Primera Instancia e Instrucción correspondientes de Talavera de la Reina y Torrijos.