Los investigadores, que seguían muy de cerca la pista de estos delincuentes tras sus operaciones de distribución en la provincia de Ciudad Real, los interceptaron en el momento exacto de la entrega de la droga, junto a un laboratorio de cocaína oculto en un trastero de la capital, en el que se decomisaron 3.605 gramos de esta sustancia, además de útiles y efectos para el corte y distribución de la droga, así como tres vehículos “caleteados”, según ha informado la Policía Nacional en un comunicado de prensa.
Los detenidos formaban parte de dos organizaciones criminales, una asentada en Madrid y otra con base en Ciudad Real capital que suministraba la droga a numerosos puntos de la provincia mediante una red logística con sedes en las localidades de Pozuelo de Calatrava y Valdepeñas. Este grupo criminal se abastecía de grandes cantidades de estupefacientes en Madrid para finalmente procesarlo y distribuirlo en dosis en toda la provincia de Ciudad Real.
Los miembros de la organización contaban en su mayoría con dilatada experiencia y antecedentes penales previos por tráfico de drogas, extremando las medidas de seguridad en sus desplazamientos, para los que utilizaban vehículos con
compartimentos ocultos, denominados “caletas”, así como una red de pisos y garajes que dificultaban enormemente la localización de los puntos de almacenaje y corte de la droga.
Compleja investigación operativa desarrollada en tres fases diferentes
La operación “VILLA” ha supuesto la explotación en tres fases diferentes de una compleja investigación policial a lo largo del 2023 en torno al procesamiento, distribución y venta de cocaína por parte de dos organizaciones criminales formadas principalmente por miembros de origen colombiano y con dilatada experiencia en el tráfico de estupefacientes.
La primera fase se llevó a cabo en los meses de mayo y julio de 2023, cuando los agentes interceptaron dos envíos de cocaína de 130 y 101 gramos respectivamente. Las investigaciones permiteron a la Policía Nacional desenmascarar la estructura de la organización e identificar a sus máximos responsables, por lo que se decició la explotación policial de dicha investigación en dos nuevas fases operativas en los meses de agosto y septiembre.
La Policía Nacional ha detenido finalmente a ocho personas por delitos contra la salud pública. Además, se han llevado a efecto cinco registros en los que se han desmantelado dos laboratorios de cocaína que contaban con toda la infraestructura, básculas de precisión, útiles y sustancias de corte para el procesamiento y distribución final de la droga.
En total, se han decomisado 5.000 gramos de cocaína, 16.700 euros en efectivo y siete vehículos, cinco de los cuales estaban perfectamente “caleteados” para la ocultación de la droga y el dinero efectivo en sus desplazamientos.
