El Duque de Palma, Iñaki Urdangarin, cobró presuntamente 140.000 euros en una cuenta corriente domiciliada en Suiza por la búsqueda de inversores en favor de la empresa Inversiones Financieras Aguas de Valencia (AGVAL), servicios por los que inicialmente pactó percibir 125.000 euros trimestrales junto a su colaborador José María Treviño, trabajos que finalmente no fructificaron.
En un escrito de la Fiscalía Anticorrupción incluido en una subpieza del caso Nóos que hasta el momento se encontraba bajo secreto y a cuyas diligencias ha tenido acceso Europa Press, la acusación pública señala que fue a principios de 2008 cuando Urdangarin se puso en contacto con el presidente de la anterior empresa, Eugenio Calabuig, para impulsar estos proyectos, por los que finalmente la mercantil abonó tres facturas por un total de 375.000 euros.
Según el Ministerio Público, a efectos de mantener la opacidad de las transacciones, el colaborador de Urdangarin utilizó los servicios del testaferro Robert Cockx, quien para ello cedió una empresa fiduciaria de su propiedad, Alternative General Services, domiciliada en Irlanda y cuya cuenta corriente estaba radicada en Laussane (Suiza). El supuesto hombre de paja habría cobrado un 5 por ciento de las operaciones a cambio de figurar en las mismas.
Así, el contrato entre Urdangarin y Treviño con Calabuig fue suscrito formalmente por Cockx en representación de Alternative General Services, todo ello por la búsqueda y localización de proyectos de inversión que finalmente no fructificaron, lo que motivo la rescisión del acuerdo rubricado.
Fue entonces cuando Cockx, por orden del Duque de Palma y su colaborador, emitió tres facturas contra AGVAL por un importe global de 375.000 euros, que fueron transferidos en la cuenta corriente de Cockx en Suiza. Acto seguido, el presunto testaferro, tras descontar su 5 por ciento, traspasó la cantidad restante a otra cuenta del país suizo perteneciente a la empresa Star Opcions, perteneciente a Treviño.
De este modo, desde la cuenta del colaborador del marido de la Infanta Cristina finalmente se realizó otra transferencia, por importe de 140.000 euros, para el pago de los servicios del propio Urdangarin.
DOS ESTRUCTURAS OPACAS PARA DESVIAR FONDOS
En el mismo escrito, el Ministerio Público señala asimismo cómo en 2006 Urdangarin y su exsocio, Diego Torres, ordenaron al encausado Miguel Tejeiro poner en marcha las gestiones necesarias para crear una estructura societaria fiduciaria con el objetivo de ocultar los verdaderos beneficiarios de los fondos que transitarían por la misma, y obtener beneficios fiscales derivados del régimen al que estaban sometidas estas estructuras.
Así las cosas, fue creada una estructura formada por las empresas Blossom Hills y De Goes Center for Stakeholder Management, a cuyas cuentas corrientes fueron transferidos, según las investigaciones, un total de 420.000 euros desde el Instituto Nóos y 50.000 desde De Goes.
De forma paralela también habría sido impulsada una segunda trama opaca para desviar los fondos particulares de Torres, de forma que a través de Tejeiro, ordenó al abogado Salvador Trinxet la creación de esta estructura, con una sociedad matriz en Belice y una empresa filial en Londres, Vikram Strategy, a través de la cual se habrían canalizado fondos procedentes de Nóos o de las sociedades vinculadas a Urdangarin y Torres.