Hubertus se considera un hombre polifacético y permeable, sobre todo, a actividades artísticas que lo mantengan en constante ebullición. Su vida es un ir y venir por ciudades de todo el mundo, Italia, Austria, España y Marbella, por supuesto, adonde regresa siempre que puede y más en verano. Hijo del príncipe Alfonso de Hohenlohe e Ira von Fürstenberg, es uno de los nombres propios de la historia de la Marbella turística, marca que su padre impulsó y ayudó a promocionar internacionalmente. Pero hoy el protagonista es su hijo
Hubertus cantante
La música no es nueva para Hubertus von Hohenlohe, quien ya en los años 80, y producido por Fernando Arbex, se estrenó con el tema pop Tears of Love. De regreso a este terreno, Hubertus cantó ayer en vivo en el Marbella Arena para presentar su actual proyecto musical: Yo no soy flamenco, que ha contado con el apoyo de Diego El Cigala, Farruco y Farruquito, entre otros artistas del jondo nacional. El single se apoya en un vídeo dirigido por la también marbellí Eva Nielsen, y filmado en la barriada sevillana de Las Tres Mil Viviendas
Yo no soy flamenco
Detrás del título de la nueva canción de Gipsy Prince hay la historia de una fiesta flamenca que Hubertus organizó en su casa de la vecina Ronda. Rodeado de artistas flamencos se arrancó a tararear algunos compases, que fueron jaleados por sus amigos. El alarde no solo gustó sino que cuajó en el pegadizo y lleno de ritmo Yo no soy flamenco, que en cierto modo es una declaración musical de admiración por el universo gitano y el arte en general. Según su discográfica, el objetivo de Hubertus Hohenlohe es que "toda España se entere de que Gypsy Prince dice que no sabe cantar flamenco"