El entrenador del Atlético de Madrid, Diego Pablo Simeone, ha asegurado que no cambia "absolutamente nada" de lo que dijo tras el derbi madrileño, cuando afirmó que Thibaut Courtois había provocado a la grada, y cree que se "tergiversaron" sus palabras, y abogó de nuevo por poner una "sanción también al que provoca".
"Yo estoy muy bien, estoy tranquilo. Soy una persona muy clara, frontal, me gusta decir lo que siento. No voy a cambiar absolutamente nada de lo que dije el otro día. Antes de la conferencia de prensa, en tres notas individuales reforcé absolutamente el rechazo a la violencia, el rechazo a los agresores lo primero, teniendo como club una gran oportunidad para hacernos fuertes y mostrar hacia afuera lo que se tiene que hacer", declaró en la rueda de prensa previa al partido ante el Benfica.
Sobre sus palabras sobre Courtois, cree que se "tergiversaron". "Posteriormente di una opinión, y esa opinión la tergiversaron y la llevaron a donde les convenía, que ya no es mi problema. Ya le sucedió al 'Dibu' Martínez con el gesto de la Copa América al rival -le sancionaron-. Creo que esto hace mejor al fútbol. Le tocó a Courtois el otro día, no había otro que se llamase Pablo, si no diría Pablo. Pero fue Courtois y los gestos que estoy explicando se vieron también. Eso no justifica lo demás", manifestó.
"Yo expliqué la primera situación y después di una opinión. El comunicado que el club hizo, que fue perfecto, no tiene por qué acompañar al entrenador, porque el entrenador dio una opinión de lo que piensa. Va a haber jugadores que cuando griten un gol a la tribuna y hagan un gesto, los árbitros lo van a amonestar. Y después, todo esto que yo dije va a quedar en el recuerdo. Muchos se aprovecharon para divertirse un rato entre lunes y martes", añadió.
Sobre por qué considera que se malinterpretaron sus palabras, el técnico argentino afirmó que "la televisión necesita atención". "Los entrenadores tenemos que hablar antes del partido, cosa que antes no sucedía, tenemos que hablar enseguida después del partido, y vamos a 200 millones de revoluciones, pero no cambia absolutamente nada, porque si no le hubiesen preguntado a una heladera. Yo no soy una heladera, yo tengo mis sentimientos y mis pensamientos y tengo mi opinión, que muchas veces la digo y muchas veces me la callo", indicó.
"El otro día no me callé, simplemente dije algo que muchos ven, no tengo ninguna duda porque me han llegado millones de mensajes agradeciendo lo que dije. Yo me pongo en primer lugar, si en algún momento me llega a suceder, sanción, y sanción también al que provoca desde el lugar que tiene de protagonista. No nos olvidemos que estamos en una sociedad donde todo es muy sensible y necesitamos firmeza absoluta. Si lo expliqué en tres entrevistas personales antes de llegar a la conferencia, lo expliqué nuevamente en la conferencia y después el disparador va para otro lado, discúlpeme", prosiguió.
En este sentido, recalcó que "no fueron días simples" porque "no fue bueno lo que sucedió". El club está trabajando, ya tiene un implicado y seguramente encontrará a los otros, y hay que sacarlos directamente porque no necesitamos a esa gente. El equipo va entrando en el partido que tenemos mañana", subrayó.
Sin embargo, no quiso opinar de la sintonía de los jugadores con los ultras tras el duelo. "Para mí el partido terminó, la gente que tiene que trabajar en lo que sucedió está trabajando. Para el Atlético de Madrid es una gran oportunidad para hacerse fuerte como club. Por mi parte, rechazo absoluto y total para aquellos agresores. Invito a reflexionar si se puede sumar a esta situación el futbolista que provoca, si lo podemos evitar", expresó.
La vuelta de la Champions
En otro orden de cosas, el 'Cholo' explicó que han tenido "poco tiempo para preparar el partido" ante un rival complicado. "Seguimos en la fase de recuperación, pero la 'Champions' es diferente. La 'Champions' invita a hacer un esfuerzo por trabajar y buscar el partido que queremos. Intentaremos competir como lo venimos haciendo, sobre todo llevar el partido a donde creemos que le podemos hacer daño", dijo. "Ahora pensamos en el Benfica, que es un rival duro, difícil, que juega bien, ataca con mucha gente, tiene personalidad, tiene jugadores de experiencia y será un partido muy duro", continuó.
Por otra parte, valoró el regreso al Estádio da Luz, donde el cuadro rojiblanco perdió la final de la Liga de Campeones de 2014 ante el Real Madrid. "Me da alegría. De haber pasado un momento maravilloso como el haber ganado LaLiga en el Camp Nou una semana antes a jugar una final de 'Champions', es el momento soñado de cualquier entrenador, de cualquier hincha, cualquier jugador, y nosotros lo pudimos vivir. Dimos el máximo, nos enfrentamos con un rival que fue superior, que merecía antes de lo que había pasado ganar. Estuvimos tan cerca que nos quedamos con ese sabor de que habría sido muy bonito haberlo logrado", señaló.
Por último, Simeone dio su opinión sobre la retirada de Antoine Griezmann de la selección francesa. "Me parece maravilloso cuando un futbolista de la jerarquía de Antoine toma una decisión como la que ha tomado. Habla muy bien de él, habla muy bien de la calidad humana y deportiva que tiene. Entiende que le ha dado todo a su selección, porque se lo ha dado absolutamente todo. Hoy está en un lugar con la tranquilidad de haber dado todo y de dar un paso al costado, de la felicidad que ha tenido de compartir tantos años con sus compañeros. A nosotros nos permitirá que tenga más descanso. Es un futbolista muy importante para nosotros", finalizó.