"Él adoptó una postura de integridad en relación a su club, que no podía fichar. Sin esa sanción, se habría marchado sin género de dudas", contó en una entrevista a "France Football". Separado profesionalmente de Griezmann desde el pasado junio después de haber trabajado con él desde hace más de una década, Olhats reconoció que al futbolista le haría bien irse del Atlético para "empezar de cero" y sentir un nueva motivación ante un desafío diferente.
En su opinión, los numerosos compromisos publicitarios del internacional francés, imagen de varias marcas desde que acabó el Europeo de 2016, han podido "invadir" la parte deportiva e influir negativamente en su rendimiento. "Es un buen reclamo para las marcas y los medios de comunicación, y encima a él le gustan las redes sociales. ¡Pero es futbolista, no cantante!", opinó Olhats, quien descubrió a Griezmann a los 13 años y le llevó a la Real Sociedad.
El exasesor desmintió que la esposa del delantero, Erika, prefiriese que el jugador se quedase en Madrid -"ella le seguiría hasta el Polo Norte"- y pronosticó que saldrá del pequeño bache de rendimiento porque es "un chico inteligente".
También en "France Football", que dedicó un reportaje especial al estado de forma de Griezmann, se pronunció el antiguo seleccionador de Francia, Raymond Domenech. "Ha conocido un auténtico torbellino mediático que no le ha ayudado a reflexionar, ni a descansar (...) Necesita a alguien que le diga: 'Vuelve al tomar el buen camino, el de los terrenos de juego, no el de los medios de comunicación, la publicidad, ni la vida exterior'",dijo Domenech, seleccionador entre 2004 y 2010.
"Ahora tiene 26 años, la edad de Zinedine (Zidane) en 1998 (cuando Francia ganó el Mundial). Ahora le toca jugar la Copa del Mundo (2018, en Rusia) para probar que llega al nivel" de Zidane, remató.