Las horas de exposición a los dispositivos móviles y la utilización de mascarilla, que desvía todo el aire hacia los ojos, están provocando un aumento de las consultas en farmacias sobre ojo seco, una patología que afecta a entre el 15% y el 30% de la población, según Portalfarma.
El Consejo General de Colegios Farmacéuticos, a través de su vocalía nacional de Óptica y Acústica, ha lanzado una campaña en colaboración con el laboratorio Théa para promover la prevención de esta patología.
Con este objetivo, el Consejo General ha creado una guía de intervención y un protocolo de actuación para educar a la población, detectar posibles casos y derivar al especialista.
La vocal nacional de Óptica y Acústica del Consejo General, María Isabel de Andrés, destaca como el 60% de la población adulta se ve afectada por esta patología provocada por cambios en la cantidad y la calidad de las lágrimas.
Entre las causas, la edad, el uso de las lentillas, ciertas infecciones y algunos medicamentos son responsables de esta patología, pero además “el exceso de uso de pantallas durante el confinamiento así como las mascarillas, que desvían todo el aire hacia los ojos, han provocado un repunte durante la pandemia”, como señala María Isabel de Andrés.
Ciertos fármacos provocan también sequedad ocular por reducción de la secreción lagrimal, por lo que el farmacéutico valorará cada situación.
Entre las soluciones, las lágrimas artificiales representan la primera medida para mitigar los efectos del ojo seco, si bien hay que estudiar cada caso en función, entre otros, del usuario y de si utiliza o no lentillas. Además hay que consultar con el oftalmólogo cuando se presenten otras enfermedades relacionadas.
