Al menos doce personas que practicaban rafting han muerto en la crecida del río Raganello, en la región de Calabria, en el sur de Italia. El Departamento de protección civil ha informado de que 18 personas han sido rescatadas y seis de ellas han resultado heridas.
La mayoría de los afectados han sido trasladados al Hospital de Cosenza mientras continúa la búsqueda de posibles víctimas, ya que se desconoce si hay más desaparecidos debido a que muchos se aventuran por el torrente sin guía.
Aún se desconoce la nacionalidad de los fallecidos y heridos, pero la mayoría de turistas y excursionistas que visitan la zona son italianos.
"En condiciones meteorológicas normales, la ruta de la garganta de Raganello pueden hacerla niños, pero hoy hubo una fuerte tormenta a gran altura, lo que produjo la crecida", ha explicado el propietario de un hostal cercano en declaraciones a la agencia de noticias italiana ADNKronos.
El hostelero asegura que los ancianos no recuerdan una crecida igual en 50 años y destaca que el nivel del agua subió vertiginosamente en apenas media hora.
"La garganta se llenó de agua en un espacio de tiempo muy corto", ha afirmado el jefe del departamento de protección civil de Calabria, Carlo Tansi.
"Es un terreno realmente difícil, lleno de obstáculos debido a la formación geológica de la zona", ha señalado, por su parte, Eugenio Fracciolla, fiscal jefe de la capital provincial, Cosenza. Además ha anunciado que los equipos de rescate están trabajando para localizar a algunas personas que podrían haber sobrevivido en algunas zonas.
La garganta del Raganello es un cañón de unos 17 kilómetros que desemboca en la localidad de Civita di Castrovillari. Es frecuentado por excursionistas y turistas que bajan la corriente aprovechando sus rápidos. La zona pertenece al Parque Nacional del Pollino.