"Lo peor se ha evitado, aunque la batalla todavía no se ha ganado totalmente. Las próximas horas serán difíciles, pero gracias a su coraje (de los bomberos) la fachada y las dos torres principales no se han caído", dijo Macron en una declaración a la prensa.
El presidente recordó en primer lugar a los servicios de extinción de incendios, al afirmar que "más de 500 de ellos se baten desde hace horas y siguen ahí. Lo hacen con un coraje extremo y gran profesionalidad".
Tras agradecer también a la alcaldesa de París, Anne Hidalgo, y al conjunto de servicios del Estado, Macron proclamó de forma solemne que Notre Dame será reconstruida "entre todos juntos". "A partir de mañana pondremos en marcha una suscripción nacional y más allá de las fronteras de Francia. Y haremos un llamamiento a los mayores talentos", anunció.
El presidente subrayó junto a la catedral que, para los franceses, "Notre Dame es nuestra historia, nuestra literatura... Es el epicentro de nuestras vidas, el patrón de donde parten nuestras distancias".