En rueda de prensa tras el Consejo de ministros, Báñez ha insistido en que la reforma ha sido compartida por todos y es "buena", no sólo para los trabajadores y las empresas, sino también para la sociedad, en términos de mayor control, transparencia y evaluación permanente.
Ha asegurado que "no se perderá ningún euro" con el nuevo modelo. Para ello habrá una Unidad especial de Inspección, dentro del ámbito de la Inspección de Trabajo y Seguridad Social, pero también se elevarán las sanciones para las empresas que utilizan de manera irregular los fondos recibidos.
También ha confirmado que habrá un sistema integrado de información entre Gobierno y comunidades autónomas para saber, en todo momento, "qué formación se está dando, qué personas se están formando, y en qué se está formando cada uno de los trabajadores".