Todos los arrestados, según ha informado la Dirección General de la Policía, son creadores y distribuidores de troyanos de control remoto, keyloggers y puertas traseras que permiten controlar los ordenadores de sus víctimas.
Y lo hacían de tal manera que el aspecto de estas herramientas no resultaba sospechoso a los programas antivirus que pudieran operar en los ordenadores que "asaltaban".
Según la Policía, esta "compleja" investigación, coordinada por Europol, ha sido posible gracias a la colaboración entre la Unidad de Investigación Tecnológica de la Policía Nacional española, la Unidad Nacional de Cibercrimen del Reino Unido y el servicio de investigación de amenazas de la firma informática Trend Micro.
Estas herramientas se promocionaban y comercializaban en los foros de hacking más famosos, tanto a nivel nacional e internacional, y a cambio generalmente de pagos en bitcoins y en tarifas basadas en el recuento de infecciones efectivamente conseguidas.
Según los datos de los investigadores, esta actividad se ha estado llevando a cabo desde mediados del año 2013 y ha originado sustanciosos beneficios a sus responsables, procedentes de la ciberdelincuencia internacional.
Las herramientas desarrolladas por los detenidos habrían sido utilizadas a nivel mundial para la distribución de troyanos de control remoto.
Es decir, son software maliciosos que toman el control total del ordenador de la víctima, dañando o sustrayendo todo tipo de información privada, incluyendo la obtención de las credenciales para la cuentas de correo electrónico, redes sociales, banca online, etc.
La investigación ha culminado con la detención de dos individuos en el Reino Unido y tres en España. Además, se han efectuado registros en las localidades de Santa Perpetua de la Mogoda (Barcelona), en Santa Lucía de Tirajana (Las Palmas de Gran Canaria) y en Las Palmas de Gran Canaria, así como dos en Liverpool.
En los registros practicados en España se han intervenido seis discos duros, un ordenador portátil, un disco duro externo, dos dispositivos de almacenamiento externo, ocho dispositivos de minado de bitcoins, tres tarjetas prepago sin titular y documentación de cuentas bancarias.
Recuerda la Policía que la lucha operativa contra la ciberdelincuencia orientada al desarrollo y venta de este tipo de herramientas es una de las prioridades operacionales de Europol, incluida en su Informe de Evaluación de la Amenaza del Cibercrimen Organizado del año 2016.