El Ministerio de Educación puso sobre la mesa hace unos días la necesidad de limitar, o no, el uso de los teléfonos móviles en determinados espacios y, sobre todo, en determinadas edades tempranas, después de que haya habido una contestación social ante los crecientes problemas de relación entre los jóvenes y los accesos a redes sociales o ciertos contenidos que perjudican seriamente la educación de los jóvenes.
Debate importante para las familias. De momento, lo que dice la normativa riojana en cuanto al uso de los móviles en los centros educativos es esto que señala el director general de ordenación educativa Fabián Martín.
En La Rioja también ha surgido un movimiento de padres que abogan por esas limitaciones. Es un grupo de Telegram ”Adolescencia libre de móvil” que espera ver qué decisiones adopta la administración, aunque piden, de cara a Navidad, que el móvil no sea uno de los regalos. Dejan claro que no van contra la tecnología, que forma parte del presente y del futuro, pero sí de ciertas prácticas.
La Consejería de Educación también apuesta por el uso responsable más que por la prohibición, decía el director general Fabián Martín.
Sobre esta problemática, Borja Vázquez, experto de Syndeo, señala que la reducción del uso del móvil para los adolescentes señala que reducir el uso es positivo, no solo en las aulas, sino en términos generales.