Niños de infantil en Os Rosais protestan por altas temperaturas

El delegado territorial de la Xunta, Rogelio Martínez, anuncia una solución inmediata

 

ondacero.es

Ourense | 25.04.2014 08:40

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os rosais | Faro de Vigo

Medio centenar de niños y padres acudieron al CEIP Amadeo Rodríguez Barroso de Os Rosais completamente equipados con flotadores, gafas de sol, sombrillas, pelotas y bañadores para protestar, mediante la escenificación de una jornada de playa -aunque vestidos con prendas de abrigo por las moderadas temperaturas de la jornada de ayer-, contra la subida del termómetro en las aulas, que en ocasiones alcanza los 35 grados. Los alumnos Antón Blanco y Laura Carballo leyeron un manifiesto para dejar constancia de que "Os nenos dos Rosais non somos tropicais", actuación que se suma a otra protesta que realizaron meses antes para protestar contra las deficiencias de la calefacción, en la que expresaron: "Os nenos dos Rosais non somos esquimais", ataviados con mantas, guantes y bufandas.

Responsabilizan de la situación al equipo que diseñó el edificio, sin tener en cuenta las características meteorológicas de la zona, y a las autoridades que lo recepcionaron.

Padres y alumnos destacan que las aulas orientadas al sur padecen un serio problema por las elevadas temperaturas que soportan durante la primavera, pero también en algunos días del otoño e incluso del invierno. "Cuando el sol pega en las ventanas, el calor va subiendo hasta hacerse insoportable para los niños y profesores", relatan. No pueden bajar las persianas para solucionar el problema, "porque son negras y aún captan más el calor y se impide la ventilación". El problema se agrava en las aulas del bajo, que son las de educación infantil, a las que "llega también el calor rebotado del patio pavimentado con caucho". Por lo que advierten de que puede constituir "un grave riesgo para su salud".

Los niños destacan a mayores en su manifiesto que las ventanas de aluminio son negras y las persianas están colocadas por dentro, por lo que constituyen un magnífico sistema para "aprovechar la energía del sol a tope", similares a las placas solares que tienen en el parque, al lado del colegio.

Los alumnos Antón Blanco y Laura Carballo reconocen que el edificio "es nuevo" y que ha tenido un alto coste, "pero tiene defectos muy grandes" para la función que ha sido concebido. "Es un centro de enseñanza de Infantil y Primaria, no una granja de pollos", agregan. Por lo que reclaman que los técnicos que idearon y desarrollaron la construcción, "asuman el coste de las reparaciones" que requiere.

El delegado territorial de la Xunta, Rogelio Martínez, anuncia una solución inmediata. Avanza que ya se ha contratado la colocación de toldos en las aulas de infantil -como recomiendan los técnicos-, por ser "las más urgentes", según los padres. La ejecución se realizará en el mes de mayo, sin interrumpir las clases.

La colocación de toldos se realizará de forma escalonada en las aulas afectadas, debido a la concentración de calor en la zona sur, "donde da el sol" desde media mañana, hasta las primeras horas de la tarde. "Las de este año ya están contratadas, y el año que viene se hará en algunas aulas más", además de acometer otras mejoras, anuncia Rogelio Martínez.

El delegado de la Xunta destaca que la Consellería de Educación está realizando inversiones todos los años en ese centro. "Hubo un problema con la caldera de la calefacción, que se tuvo que cambiar el año pasado, con un coste de más de 60.000 euros, y se realizaron otras mejoras, como el cambio de una nueva estructura que tenía ciertos problemas".

Martínez indica que se trata de un problema "que nos encontramos ahí". Y reconoce que el diseño, con la utilización de energías limpias, "parece que no ha tenido el resultado esperado".