Los tres grupos del Botànic (PSPV, Compromís y Unides Podem) han presentado este lunes su propuesta de tasa turística, que podrán aplicar los ayuntamientos cuando pase un año de moratoria desde su aprobación. Tendrá un coste según la categoría del establecimiento y los consistorios podrán establecer dos tramos anuales para su aplicación según la temporada turística. Así se recoge en la propuesta de ley de este Impuesto Valenciano sobre Estancias Turísticas, el nombre oficial de esta "tasa turística". Ahora comienza una tramitación que se espera que concluya sobre el mes de noviembre, con lo que este tributo no podría aplicarse antes de 2024 teniendo en cuenta la moratoria.
La tasa plantea nueve exenciones a su aplicación, entre ellas las estancias de los menores de 16 años, las motivadas por la salud o las de competiciones deportivas oficiales; una cuota diaria que va desde los 50 céntimos de las pensiones y los cámpings hasta los dos euros de los hoteles de lujo y una limitación de siete días.
Ferran Martínez de Podem asegura que es un importante avance para el turismo valenciano, en la línea de los grandes destinos del mundo.
El presidente de la Generalitat, Ximo Puig, ha afirmado este lunes que la tasa turística "no es una excentricidad", pero ha matizado: "otra cosa es que ahora sea oportuna su aplicación y no se aplicará con carácter inmediato".
La portavoz del PP, María José Catalá, acusa al Consell de no ser claros con este tema:
