El consistorio de l’Alfàs del Pi mantiene actualmente una moratoria que impide la retirada de viviendas destinadas al alquiler de larga duración o a vivienda habitual. Según ha explicado el primer edil, Vicente Arques, esta medida busca garantizar el uso de la vivienda como residencia permanente y no como alojamiento turístico.
Dentro de esta estrategia, el Ayuntamiento se ha adherido al Plan Vive de la Generalitat Valenciana, poniendo a disposición de la administración autonómica dos grandes parcelas municipales.
A estas actuaciones se suma el desarrollo del sector Finca Roca, un plan parcial de 400.000 metros cuadrados situado entre la carretera nacional y el núcleo urbano. El proyecto contempla una zona terciaria con espacios comerciales y una segunda fase residencial. En esta última, el Ayuntamiento dispondrá de una parcela donde se plantea la construcción de unas 120 viviendas de protección pública.
