LA SIGNATURA

Traspiés imperdonable

Se le había complicado la liga al Barcelona por el triunfo sabatino Del Real Madrid, pero se le había allanado el terreno en la Champions con las derrotas del Girona y el Atlético de Madrid.

Alfredo Martínez

Catalunya | 12.02.2024 08:44

Jugaba en casa contra el penúltimo clasificado y equipo, el Granada que solo había sacado un punto fuera de su estadio. Vamos, el escenario ideal para conseguir los tres puntos, Reforzar el estado anímico de la plantilla y recortar diferencias con respecto a los más directos rivales.

Lo tenía todo de cara para que hubiera sido un buen fin de semana, y sin embargo, terminó como lo que está siendo esta temporada, un partido desesperante, una muestra más de impotencia, un cúmulo de errores defensivos imperdonables, que penalizan gravemente al equipo y más puntos que se le marchan en la lucha por los objetivos. Hubo una jugada clave en el partido que no debe de pasar desapercibida y fue la ocasión clarísima de gol de Lewandowski, a pocos minutos del final, que salva bajo palos Hongla, tras una magnífica combinación entre Pedri, Gündogan y el propio Lewandowski. Unos instantes después empata el Granada al filo del descanso y genera toda la confusión que llegaría después. No me cabe la menor duda que de haber acertado el polaco estaríamos hablando de una victoria relativamente cómodo del Barcelona, pero, como viene siendo habitual, errores individuales, penalizan y mucho al Barcelona. En esta oportunidad, mayoritariamente fueron en defensa pero el hombre gol del Barcelona solo con la portería casi vacía y son un defensa bajo palos no puede perdonar esa situación que habría solucionado el partido. Es gravísimo que el Barça, a estas alturas de la temporada haya encajado 33 goles en liga y que los últimos encuentros reciba goles de tres en tres en su propio estadio, con una enorme facilidad, como han demostrado Villarreal y el siempre, modesto Granada, que no daba crédito a la cantidad de oportunidades que tuvo. es más de no haber estado Ter Stegen en la portería posiblemente estuviéramos hablando ahora hasta de una derrota, pues el alemán sacó dos clarísimas oportunidades de gol del equipo andaluz que podrían haber incluso empeorado las cosas para los locales.

No tiene una explicación fácil la cantidad de errores defensivos que comete el equipo y que el propio entrenador reconoció a acabar el partido, son errores impropios de la categoría y que, lógicamente ante futbolistas de cierto nivel son imperdonables, porque te penalizan gravisimamente, casi siempre con goles. es evidente que la liga está imposible, por la distancia que tiene con respecto al líder, el Real Madrid, que se muestra muy sólido.

Pero ya no solo por eso, sino por la irregularidad, la poca consistencia y los enormes fallos que comete el Barcelona partido tras partido. No es un equipo seguro, solvente de garantías y por tanto no tiene crédito como para apostar por él para ninguno de los objetivos. Bastante es como se está complicando las cosas que pueda asegurarse un puesto entre los cuatro primeros y si es posible intentar desbancar al Girona de la segunda plaza, pero tal y como está mostrando de irregular todo es posible de aquí a final de temporada. Lo de ayer ante un equipo casi descendido es una buena muestra del año que llevamos y sufrimos.