La actual realidad del Barcelona nos dibuja un escenario muy diferente al vivido durante los últimos 15 años. Aquel Barcelona que era referente mundial y que tenía seis y siete jugadores incluidos en ele mejor once mundial, parece bastante lejano.
¡ Que tiempos cuando la delantera la formaban un tal Leo Messi, Neymar y Luis Suarez!. Y no hace tantas temporadas pero parece un mundo.
Posiblemente no haya nunca una delantera tan poderosa como aquella o al menos será dificilísimo igualarla.
Ahora corren otros tiempos, otra situación y otra realidad muy distinta a los años dorados del club. Fichar delanteros del tipo Boateng, Braithwaite o Luuk De Jong es otra cosa.
Errores en la decisión y realidad económica provocaron que estos tres futbolistas , por poner algún ejemplo hayan recalado en el Barcelona. Hace algunos años era absolutamente impensable. No llegaban al nivel mínimo exigido para esas plantillas , que pasaban por ser de las mejores del mundo , por no decir , la mejor y con mucha diferencia.
Pero el tiempo pasa y se lo lleva todo, y se acabó aquella generación campeona, y se dilapidó mucho dinero. Y nos encontramos en un escenario de necesidad, de urgencias y de precariedad. Todo ello nos lleva a Un Barcelona en reconstrucción, convulso y en otro nivel tanto económico como deportivo. No tiene sentido engañarse.
Es verdad que el club debe mandar el mensaje de optimismo y confianza del presidente en el sentido que el Barcelona ha vuelto y que puede competir con los grandes por figuras como Haaland, pero no será fácil.
Ahora llegan momentos de apretarse aún el cinturón y ver oportunidades en el mercado como la que puede suponer Alvaro Morata. Un jugador con un currículum importante y una trayectoria en clubes grandes dignadme reseñar. Un buen delantero centro que en otras circunstancias casi seguro que no sería candidato a reforzar al Barcelona pero tal y como está él en la Juventus y el Barcelona escaso de hombres gol parece una solución interesante. Sumaría y puede sumar mucho más de lo que algunos se imaginan. Es un buen ariete y puede interpretar muy bien el sistema de juego que implanta Xavi. El técnico lo ve y solo eso creo que ya es aval suficiente para intentar traerlo. No se pierde nada, es más , mejora bastante lo he hoy, aunque es verdad que eso no parece muy difícil.