Según el escrito de acusación al que ha tenido acceso Europa Press, la Fiscalía solicita para el presunto pedófilo penas de 11 años por el delito de abuso continuado y 6 más por otro de prostitución continuada en el caso de la primera víctima, un niño de 11 años a quien no podrá acercarse en 10 años.
Para la segunda, tercera y cuarta de sus víctimas --niños de 13 y 14 años--, la Fiscalía pide 4 años de prisión por cada uno de los tres delitos de prostitución de menores, es decir, 12 años en total y la imposibilidad de acercarse o comunicarse con ellos.
En el caso de la quinta víctima --un niño de 11 años-- al igual que con la primera, le piden 11 años por agresión sexual continuada y 6 por prostitución de menores; mientras que por la última --una niña de 10 años-- se enfrenta a tres años más por abuso sexual.
El modus operandi del acusado era acercarse a un parque de Almagro para entablar amistad con los niños invitándolos a refrescos y chucherías, tras lo que los invitaba a su casa --donde tenía consola y tablet-- para terminar poniéndoles pornografía y, en algunos casos, ofreciéndoles dinero a cambio de hacerles a los pequeños felaciones y tocamientos.