Por otra parte, el Consell debe otros 90 millones de euros a diferentes instituciones. En este sentido, su presidenta, Maria Salom, critica la gestión realizada por el Pacte de Progrès en la pasada legislatura por considerar que repercutirá de manera muy negativa en el futuro de los ciudadanos de Mallorca. Salom recuerda que el anterior Govern dejó una deuda pendiente de pago con el Consell de Mallorca por valor de 240 millones de euros, lo que limita aún más, asegura, su margen de actuación. El equipo de gobierno insular admite que la institución tiene un importante problema de liquidez y considera se vería abocada a entrar en concurso voluntario de acreedores si se tratara de una empresa privada. Margalida Isabel Roig, Consellera insular de Hacienda y función pública