Las voluntarias Mari Carmen García y Otilia Sánchez han compartido su experiencia en el programa Más de Uno Ibiza y Formentera, poniendo en valor la importancia de la solidaridad, el acompañamiento y la entrega desinteresada a las personas más vulnerables, especialmente a quienes se encuentran ingresados en el hospital.
Ambas forman parte activa de la Asociación Española Contra el Cáncer y de la asociación hospitalaria Nunca Solos, dedicada al acompañamiento de pacientes que se encuentran solos durante su estancia en el Hospital Can Misses. Según explicaron en antena, su labor no es asistencial, sino principalmente humana: estar, escuchar, acompañar y ofrecer compañía a quienes más lo necesitan.
Mari Carmen recordó cómo llegó a Ibiza a finales de los años 70 y cómo su compromiso solidario se ha mantenido durante más de 20 años de voluntariado. Para ella, uno de los valores que más se ha perdido con el tiempo es el compañerismo y la unión entre las personas, algo que hoy intenta recuperar a través de su labor altruista.
“El mejor regalo que puede recibir un voluntario es que, después de muchos años, alguien te reconozca por la calle y te dé un abrazo”, afirmó emocionada.
Por su parte, Otilia Sánchez explicó que su vinculación con la Asociación Contra el Cáncer comenzó tras perder a sus padres por esta enfermedad. Desde entonces, ha dedicado parte de su vida a ayudar a otras personas, incluso donando su cabello en cinco ocasiones para la elaboración de pelucas para pacientes oncológicos.
“Acompañar es muchas veces más importante que cualquier otra ayuda”, señaló.
Durante la entrevista, ambas detallaron la actividad de Nunca Solos, una pequeña asociación formada por voluntarios que acuden al hospital los martes y jueves por la tarde para ofrecer compañía, libros, juegos, música, pequeños conciertos y hasta cortes de pelo solidarios gracias a la colaboración de centros formativos.
“Hay muchas personas que no reciben visitas y el voluntario es la única cara amiga que ven en todo el día”, explicaron.
Las voluntarias hicieron además un llamamiento a la ciudadanía para unirse al voluntariado, recordando que basta con acercarse al Hospital Can Misses, en la planta 4ª de Medicina Interna, donde se encuentra la sala de la asociación. También animaron especialmente a la gente joven a implicarse en este tipo de iniciativas.
Finalmente, enviaron un mensaje de apoyo a su compañera María, que atraviesa un momento complicado, demostrando una vez más que la solidaridad no solo se ejerce hacia fuera, sino también dentro del propio equipo.
“No pedimos nada a cambio, solo estar para los demás. Lo que recibimos es siempre mucho más de lo que damos”, concluyeron.
