Modric, como le ocurrió el pasado Mundial de Brasil 2014 al argentino Leo Messi, recibió el reconocimiento un tanto triste tras haber perdido la final, ante Francia (4-2).
El centrocampista balcánico superó en la elección del grupo de estudios técnicos de la FIFA al belga Eden Hazard y al francés Antoine Griezmann, elegidos balón de plata y de bronce, respectivamente.
Kylian Mbappe, delantero del PSG autor de uno de los goles franceses en la final, fue designado mejor joven del torneo, en tanto que Thibaut Courtois fue elegido mejor portero.
El guardameta belga no pudo recibir el premio en el estadio Luzhniki ya que acabó el sábado su participación en San Petersburgo, donde logró la tercera plaza al imponerse a Inglaterra.
Al inglés Harry Kane, máximo artillero de la competición, le ocurrió lo mismo. La bota de plata fue para Griezmann con cuatro tantos y dos asistencias y la de bronce para el belga Romelu Lukaku con un pase menos.