El Baskonia conquista Madrid y se adelanta en la final de liga
El Kirolbet Baskonia ha golpeado primero en la final de la Liga Endesa (0-1) tras conquistar este miércoles el WiZink Center y superar al Real Madrid en un partido muy igualado (90-94).
El Kirolbet Baskonia sacó la victoria (90-94) este miércoles del WiZink Center ante el Real Madrid para apuntarse el primer punto de la final de la Liga Endesa, en un apretado estreno por el título que se decidió en los tiros libres del último minuto y medio ante el amago de épica local, para poner a los vascos por delante en la primera derrota en este 'Playoff' de los de Pablo Laso.
Los de Pedro Martínez 'robaron' el factor cancha a los blancos a las primeras de cambio, para ponerse 0-1 y verse más cerca del cuarto título liguero de su historia. El Baskonia igualó en recursos al campeón de Europa y, pese a los triples de Carroll (20 puntos), el liderazgo de Doncic o el empuje del Palacio para los locales, terminó dando el golpe con los tiros libres que anotaron Vildoza y Shengelia y que falló Ayón.
Llull y Carroll buscaron lo imposible con dos triples en los últimos 24 segundos, pero de nuevo fue fiable el Baskonia en el cuentagotas de la línea de personal para iniciar la que esperan sea revancha de la famosa final del triple de Herreros 13 años después. Los de Vitoria no se dejaron nada en el vestuario, frescos y fuertes ante un Madrid más descansado por su 5-0 camino a su séptima final. Vildoza (16 puntos y 18 de valoración) y Beaubois tomaron el Palacio.
El 'Playoff' citaba a primero y segundo en la final y ambos dejaron claro que ahora mismo son los dos mejores equipos de España. Un pulso por el tesoro de cada punto que estuvo acompañado de tensión, intercambio de golpes y una protesta general casi a cada decisión de los árbitros. El Palacio, por supuesto, también acompañó en ambiente de gala que pronto dejó adivinar el desenlace de infarto.
El Madrid frente a un espejo o viceversa. El Baskonia capaz de igualar cada virtud del campeón de Europa para ir casi siempre un par de canastas por delante hasta poner una marcha más en el tercer cuarto. En el alto ritmo, con Campazzo y Vildoza eufóricos, ambos equipos se dejaron puntos, menos Tavares y Timma. Fueron las parejas de un primer cuarto ya de vértigo (17-19).
La rotación no es problema para Laso o Pedro Martínez. Los dos equipos tiraron del fondo de armario que les ha citado en la final. El técnico del Madrid probó a enchufar a Sergio Llull y el '23' terminó entrando a la final con cuatro puntos seguidos. Para el de los vascos, tanto Huertas como Beaubois mantuvieron una sana dirección bien apoyado en el interior por Poirier. Faltaba el triple, un poco por delante los de Vitoria hasta que Rudy hizo el primero de los locales (24-25).
LOS TIROS LIBRES DECIDEN UN PARTIDO MUY EQUILIBRADO
Con el balear llegó un pico alto de calentón con los árbitros, aunque fue el único en llevarse la antideportiva advertida a todo el que pisaba el parqué. El Madrid se distrajo en la protesta y chocó con un Baskonia más centrado en defensa, hasta que un par de triples de Carroll dejaron en tablas la lucha al paso por vestuarios (39-39). Tras el descanso, Doncic quiso desnivelar la balanza con ocho puntos y su habitual presencia en el rebote, pero en el espejo vio a Beaubois y nueve puntos en el tercer cuarto.
Diez minutos en el que los azulgrana buscaron un paso más y lo encontraron en un colchón de nueve puntos para el último cuarto (58-67), dos triples de Janning mediante. Contra las cuerdas, el Madrid reaccionó con la vieja guardia de Carroll, Rudy y Llull, sin llegar a explotar en acierto y sin contar con Tavares, aún a remolque a cinco del final (70-74). Para la traca final se guardó Laso a Doncic, pero fue el artillero de Wyoming el que apretó más si cabe el desenlace con ocho puntos seguidos (78-79).
Saltó Taylor por el americano y también la enchufó. No hubo héroe ni momento clave, sino el juicio del tiro libre cuando todo está en juego. A Ayón le tembló el pulso y dio una renta de cuatro puntos a los vascos (84-88) cuando ya el reloj no daba para posesiones. Quedó el amago de épica en los triples de Llull -con la mano izquierda- y Carroll, pero el botín se lo quedó un Baskonia que, de vuelta a una final ocho años después, toma de momento la delantera.