"Esta semana hemos asistido a un debate sobre si ETA existe o no. Es evidente que ya no existe, porque el Estado la derrotó operativamente", dice Varela. Pero el País Vasco sabe que existía un conglomerado social y cultural de medios, asociaciones, ... cuya finalidad era arropar lo que ETA hacía. Ese conglomerado social todavía existe. Sortu, a través de Bildu, es la representación más visible.
La Constitución Española no es una constitución militante, porque permite la existencia de sus propios enemigos, a quienes quieren destruirla mientras no comentan delitos. Una constitución militante es la alemana, que excluye de la legalidad a los partidos que tiendan a acabar con la libertad democrática o que ponen en peligro la existencia de la República Federal de Alemania.
Lo legal no es lo mismo que lo lícito. Y un partido dirigido por personas que han cometido asesinatos, o los han encubierto o los han protegido le produce a Varela un rechazo moral. "No se puede comparar a Bildu con ningún partido".