Ayer estuvo el expresidente socialista Felipe González en 'Espejo Público' con Susanna Griso, donde estuvo comentando la entrevista que el lunes le hizo Carlos Alsina a José Luis Rodríguez Zapatero en 'Más de uno' y en la cual el tema principal fue la amnistía a los independentistas para la investidura de Pedro Sánchez.
La intrahistoria de la entrevista a Zapatero
Hace unos meses, después de la entrevista de Alsina a Sánchez, el expresidente Zapatero se quejó a una persona de su confianza, Chema Crespo, de que Alsina no le invitaba al programa 'Más de uno'.
Al respecto de eso, en su cita semanal con 'Espejo Público' Alsina explica: "yo no convoco a nadie para que opine sobre una entrevista que le hice a otra persona", dice haciendo referencia a la entrevista que le hizo a Pedro Sánchez. Además, defiende que en campaña electoral, a quien hay que entrevistar es a los candidatos que se presentan al Congreso y, por eso, no ha invitado tampoco a los expresidentes Aznar y Rajoy.
No convoco a nadie para que opine sobre una entrevista que le hice a otra persona
Fruto de la perseverancia de Zapatero fue la entrevista del lunes, que al final se ha hecho cuando él ha tenido hueco en la agenda y "cuando a mí me parecía que informativamente tenía interés".
En la entrevista al expresidente socialista, Zapatero confesó que no le gustó la pregunta que Alsina le hizo a Sánchez de: "señor presidente, ¿por qué nos ha mentido usted tanto?". En opinión de Zapatero, el planteamiento es erróneo porque no se trata de mentir, sino de cambiar de opinión.
Una visión distorsionada sobre la sentencia del TC
Asimismo, Zapatero y Alsina protagonizaron un rifirrafe al hablar de la reacción que tuvo el expresidente a la sentencia del Tribunal constitucional sobre el Estatut de Cataluña.
Según Alsina, "ha ido calando con el paso de los años una versión distorsionada de lo que sucedió con la sentencia del Constitucional del 2010", y ahora se cree que el TC declaró inconstitucional el Estatut por la mínima. Sin embargo, como el lunes se recordó, el Constitucional declaró inconstitucionales 14 artículos y no por la mínima, sino con ocho votos a favor y dos en contra.
"Mi conclusión es que si la reacción del president Montilla hubiera sido más parecida a la de Zapatero del primer minuto tras la sentencia, a lo mejor nos habríamos ahorrado todos muchos problemas", zanja Alsina.
