Funerales y tristeza son dos conceptos que siempre han ido unidos, o quizás no. La escritora Mado Martínez nos cuenta como, no hace tanto, en siglo XIX, los funerales no eran motivo de amargura sino de celebración. El llamado 'Vetlatori del Albaet', tenia su origen en tierras valencianas y hacía referencia al velatorio de un niño. Mientras se velaba al pequeño, era costumbre de dedicar al albat diversas coplas acompañadas de música como expresión de alegría por la "suerte" de que el niño consiguiese con la muerte ascender directamente al cielo.
Los funerales alegres del siglo XIX
Funerales y tristeza son dos conceptos que siempre han ido unidos, o quizás no. La escritora Mado Martínez nos cuenta como, no hace tanto, en siglo XIX, los funerales no eran motivo de amargura sino de celebración. El llamado 'Vetlatori del Albaet', tenia su origen en tierras valencianas y hacía referencia al velatorio de un niño. Mientras se velaba al pequeño, era costumbre de dedicar al albat diversas coplas acompañadas de música como expresión de alegría por la "suerte" de que el niño consiguiese con la muerte ascender directamente al cielo.