ENTREVISTA EN LA ROSA DE LOS VIENTOS

La fagoterapia, una alternativa crucial ante la creciente resistencia a los antibióticos

Los bacteriófagos o “fagos” son virus que parasitan bacterias y que podrían resultar muy beneficiosos para combatir su resistencia a los antibióticos. Meritxell de Jesús García, bióloga del departamento de microbiología de la Fundación Jimenez Díaz, nos lo explica en esta entrevista

ondacero.es

Madrid | 02.08.2021 12:28

Meritxell de Jesús García, bióloga del departamento de microbiología de la Fundación Jimenez Díaz, nos ha atendido en ‘La rosa de los vientos’ para ampliar detalles sobre una investigación crucial que se está desarrollando en la Fundación. La bióloga explicaba que este estudio se fundamente en la búsqueda de distintos fagos -virus que paralizan bacterias- que, por ejemplo, “se pueden encontrar en las aguas del Manzanares o de mi casa”, para después “determinar si son capaces de acabar con infecciones inducidas en animales”.

No obstante, Meritxell apuntaba que de momento se está optando por la utilización de “cócteles de fagos” debido a que las bacterias podrían desarrollar resistencias a los fagos”.

El potencial de los fagos

Es un hecho que hoy en día las bacterias son más resistentes que hace diez años. Por ende, los fagos tienen un potencial enorme debido a que pueden utilizarse contra las bacterias que se han hecho resistentes a los antibióticos.

Estos fagos se pueden utilizar para combatir las infecciones superficiales, aunque los científicos están intentando que su aplicación sea también de forma sistémica. Si consiguen esto, los fagos podrían ser una buena ayuda para una terapia combinada con antibióticos, lo que tendría resultados mucho mejores.

Éxito en humanos

Meritxell de Jesús reconocía que ya se está comenzando a emplear la terapia de fagos o fagoterapia de manera exitosa. Prueba de ello radica en el caso de Tom Patterson quien, tras unas vacaciones en Egipto, enfermó gravemente de pancreatitis por cálculos biliares. La cepa que le había infectado se había vuelto resistente a todos los antibióticos que él podía tolerar y pronto entró en un shock séptico. Al darse cuenta de que su marido se estaba muriendo, Steffanie exploró terapias alternativas y halló en la fagoterapia la solución.

El caso de Tom es considerado el primero exitoso en cuanto al empleo de la fagoterapia intravenosa para el tratamiento de una infección sistémica con una súper bacteria en los EEUU.