El dinero ciega los ojos desde que en la actual Turquía en el siglo VII antes de Cristo el rey Argos inventó las primeras monedas de oro y plata. Hubo que esperar a los mongoles, al emperador Kubali Khan para ver la extensión masiva de los billetes. En Europa, Suecia fue el primer país en adoptar los billetes, en su caso con recibos firmados por el Banco de Estocolmo. Para las tarjetas de crédito hubo que esperar hasta 1914, cuando la Western Unión comenzó a ofrecer líneas de crédito sin cargo a sus clientes
Las actuales tarjetas de crédito las crea Bank Of America con las primeras Visa, mientras la Interbank apuesta por la Mastercard. En Europa la gran revolución llega con la Unión Monetaria a principios de siglo. Pues bien, el euro lleva unas semanas sufriendo frente al dólar. Pierde valor por culpa de la guerra de Ucrania. Y esto genera, de paso, una mayor inflación en el Viejo Continente pues todo lo que compramos en dólares nos cuesta más. Hay un producto, el petróleo, precisamente que siempre se paga en billetes verdes.
El miedo se apodera de nuevo de los mercados financieros
Las bolsas continentales han cerrado la semana en rojo, la española se ha dejado un 3% de valor. Los inversores no terminan de asimilar el nuevo discurso de los bancos centrales y las subidas de los tipos de interés. Un camino iniciado por la Reserva Federal. Los halcones del Banco Central Europeo no quieren esperar al verano para iniciar el encarecimiento del dinero en Europa
A todo esto Argentina ha prohibido a sus bancos operar con criptomonedas. Y según diversas consultoras Argentina es el décimo país del mundo con mayor utilización de las criptodivisas, una de las fórmulas utilizadas por los argentinos para esquivar la inflación.
Entremedias, en Estados Unidos hay una fuerte creación de empleo, 428.000 nuevos puestos de trabajo y la tasa de paro se queda en el 3,6%. En España, el mercado laboral anda revuelto y el Gobierno presiona a empresarios y sindicatos para que el lunes reanuden las negociaciones para alcanzar un acuerdo salarial. El Ejecutivo no admite que nadie se levante de la mesa.
A la vez el mercado de la energía brilla con luz propia con las nuevas sanciones contra Rusia y los detalles del plan hispano luso para limitar el precio de la electricidad enviado a Bruselas. Pero hoy no hay nada más brillante que The Rock, uno de los mayores diamantes del mundo, de 228 quilates, sale a subasta esta semana en Christies, en Ginebra, que espera un precio de venta de 30 millones de dólares.