Estos datos se recogen en un informe elaborado por el Instituto de Política Familiar (IPF), con motivo del Día Internacional de la Familia que se celebra el 15 de mayo, para instar a los partidos políticos que concurren a las elecciones generales del 26 de junio a fortalecer la institución familiar y resolver sus graves problemas.
La ayuda directa por hijo a cargo en España alcanza los 24 euros al mes, aunque el 90 por ciento de las familias españolas no puede acceder a esta prestación por los límites de ingresos impuestos, una cuantía que se encuentra muy alejada de la media de la UE-28, donde es de 91 euros al mes, según el estudio "Evolución de la Familia en España 2016".
"La familia no puede permitirse un año más de abandono por parte de las Administraciones y los partidos políticos", ha subrayado el presidente del IPF, Eduardo Hertefelder, quien ha reclamado una política integral de familia de carácter universal.
Hertfelder ha destacado que la investigación refleja el agravamiento de la caída de la natalidad y de la nupcialidad en España, así como el incremento de las rupturas matrimoniales y las dificultades de conciliación de la vida laboral y familiar.
España, con un índice de fecundidad de 1,32 hijos por mujer está lejos del nivel de reemplazo generacional (2,1) y se coloca en el furgón de cola de la natalidad en Europa, junto con Portugal, lo que está provocando la inversión de la pirámide poblacional y llevando al país a un invierno demográfico sin precedentes.
El informe pone de manifiesto el desplome en el número de matrimonios y el aumento de las parejas de hecho (1,6 millones en el año 2014), así como el incremento de las rupturas matrimoniales (105.893 en 2014).
La conciliación de la vida laboral y familiar es "una utopía", de acuerdo con el estudio, ya que siguen sin aplicarse medidas de apoyo a la maternidad, flexibilidad y racionalización de horarios, reducción de jornada o teletrabajo.
Entre otras propuestas, el IPF plantea la creación de una Secretaría de Estado de Familia, la elaboración de una Ley de Apoyo a la Familia, la consecución de un Pacto de Estado sobre la Familia y el aumento de la prestación por hijo a cargo hasta la media de la UE.
También sugiere medidas de apoyo a la maternidad y a la mujer embarazada, un aumento de los permisos de maternidad y paternidad, así como el desarrollo de una ley de mediación familiar y de un modelo fiscal justo para las familias.
