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La lista de Bonvehí a liderar PDeCAT vence con el 65% pese al voto de castigo

La sesión plenaria de la Asamblea del PDeCAT ha validado además, en una votación ajustada, que el objetivo ya consensuado de "hacer efectiva la república" se lleve a cabo "lo antes posible", en vez de que sea de forma "inmediata"

ondacero.es

Madrid | 22.07.2018 15:39

Ambiente de la Asamblea Nacional del PDeCat
Ambiente de la Asamblea Nacional del PDeCat | EFE

La lista a la dirección del PDeCAT que encabeza David Bonvehí, con Míriam Nogueras como vicepresidenta y en la que figuran numerosos nombres próximos a Marta Pascal, competirá en la votación de esta mañana con otra candidatura alternativa, con David Torrents, jefe del partido en Badalona (Barcelona), al frente. La votación se prevé que se prolongue hasta las 13.30 horas, en la jornada de clausura de la primera Asamblea Nacional del PDeCAT, celebrada este fin de semana en el Palacio de Congresos de Cataluña.

Después de la renuncia de ayer de Pascal a aspirar a la secretaría general del partido ante las presiones de Puigdemont, la confección final de la lista oficialista ha dado un giro significativo de última hora.

Con el beneplácito de Puigdemont, Bonvehí ha podido confeccionar una candidatura con menor peso del sector crítico del que se esperaba, de hecho no pueden figurar en la dirección los consellers Miquel Buch y Damià Calvet, al haber rechazado el plenario de la asamblea una enmienda que relajaba el régimen de incompatibilidades, y con numerosa presencia de colaboradores de Pascal.

De entrada, por detrás de los candidatos a la presidencia y a la vicepresidencia, la lista la encabezan tres estrechos colaboradores de Pascal en la dirección ejecutiva saliente: Ferran Bel, Montserrat Candini y Maria Senserrich. De hecho, están en la candidatura de Bonvehí la práctica totalidad de los miembros que formaron parte de la dirección de Pascal, incluidos Vanessa Ferrer, Lluís Soler, Dolors Tella, Xavier Fonollosa, así como dos nombres que ayer se daba por hecho que no podrían estar por motivos personales: Lluís Font y Meritxell Ruiz.

También se han incorporado otros nombres que han colaborado hasta ahora estrechamente con Pascal, como David Font o Marc Solsona.

El sector crítico, por el contrario, queda reducido a unos pocos nombres y, lejos de la euforia de ayer tras la renuncia de Pascal, fuentes de este grupo (abanderado por la corriente interna Moment Zero, con Joan Ramon Casals como cara visible) consultadas por Efe han lamentado que el diseño final de la cúpula haya quedado "flojo".

De los críticos se incorporan Meritxell Budó, Francina Vila y Lourdes Ciuró, además de contar con la diputada en el Congreso Míriam Nogueras en la vicepresidencia, avalada por Puigdemont, pero en cambio quedan fuera los consellers Miquel Buch y Damià Calvet, ya que el plenario de la asamblea ha rechazado una enmienda que pretendía relajar el régimen de incompatibilidades para permitir que los miembros del Govern pudieran formar parte de la dirección.

Además de Bonvehí y Nogueras, Puigdemont también sitúa a otros nombres de su máxima confianza en la dirección, entre ellos el del diputado de JxCat Lluís Guinó.

En la lista, de 30 nombres, también figuran Carles Agustí (procedente de la corriente Generació Llibertat), así como el diputado en el Congreso Antoni Postius, entre otros.

La lista alternativa está liderada por David Torrents, que aspira a la presidencia, y Lola Mata, candidata a la vicepresidencia.

Torrents fue elegido hace dos años como presidente local del PDeCAT en Badalona y el pasado abril concedió una entrevista a TV3 como mosso d'esquadra en excedencia en la que alertó de que, a su juicio, con la aplicación del artículo 155 de la Constitución en Cataluña, entonces vigente, la ciudadanía estaba menos protegida.

La número dos de la lista, como candidata a vicepresidenta, es Lola Mata Gil, que es de Sant Cugat del Vallès (Barcelona) y forma parte de la federación de las comarcas de Barcelona.

La lista, completada con otros 21 militantes poco conocidos, no tiene opciones de victoria, pero sus impulsores han dado el paso como forma de protesta por el hecho de que deban votarse listas cerradas y bloqueadas, en lugar de listas abiertas.