Según ha explicado la Guardia Civil, la llamada "Operación Yeico" la han desarrollado agentes pertenecientes al Equipo de Policía Judicial y el Equipo Roca de la Compañía de Tarifa (Cádiz), ambos de la comandancia de Algeciras.
La operación se inició durante el pasado mes de agosto, cuando la Guardia Civil abortó un alijo de drogas en la zona de Pelayo, en Algeciras, en el que intervinieron 385 kilos de hachís en el interior de una furgoneta que uno de los narcotraficantes había abandonado en una de las calles de la citada barriada, tras una persecución desde el lugar del alijo. Durante la persecución policial los agentes reconocieron al conductor del vehículo que transportaba la droga.
En la fase operativa ubicaron dos domicilios en la barriada de Pelayo, pertenecientes a los integrantes de la organización, en los que se estaban ejerciendo actividades relacionadas con el narcotráfico, realizando los registros previa autorización judicial.
En el primero de ellos se hallaron chalecos reflectantes de la Guardia Civil, una pistola, una escopeta sustraída, un "walkie talkie", un visor nocturno, cuatro armas simuladas -dos cortas y dos largas-, una motocicleta y un turismo, ambos sustraídos, además de 4.720 euros en billetes de 10 y 20. En el segundo domicilio se localizó un zulo para ocultar grandes cantidades de droga.
De los hechos se han instruido las correspondientes diligencias, que junto a los tres detenidos -dos de nacionalidad española y uno marroquí-, droga, dinero, armas y vehículos intervenidos, han sido puestos a disposición judicial.