La idea ha sido trasladada por Bruselas al Tribunal de Justicia de la Unión Europea, que le había pedido opinión sobre este asunto tras ser consultado por varios tribunales españoles.
La Comisión Europea sostiene que el cese en el uso de una determinada cláusula nula por abusiva como consecuencia de una acción individual ejercitada por un consumidor "no es compatible con una limitación de los efectos de dicha nulidad".
Esto se traduce en que los expertos de la Comisión Europea creen que la decisión del Tribunal Supremo de declarar abusivas las cláusulas suelo de las hipotecas de BBVA, Cajamar y Novacaixagalicia rebautizada como Abanca, a partir de mayo de 2013 se opone al derecho comunitario.
En aquella sentencia, el Alto Tribunal argumentó que no debía imponerse la retroactividad, lo que hubiese supuesto la devolución del dinero cobrado de más a los clientes, porque eso pondría en peligro la solvencia de un sector financiero que acababa de ser rescatado con 40.000 millones de dinero público.
Ahora, una vez conocida la opinión de Bruselas al respecto, el Tribunal de la Unión Europea debe posicionarse y ver si defiende igualmente la retroactividad de las cláusulas suelo anuladas por el Supremo.
Fuentes jurídicas consultadas por Efe destacan que la propia Comisión Europea considera que para preservar la seguridad jurídica, la protección que otorga la directiva 93/13 sobre cláusulas abusivas tiene como límite infranqueable la cosa juzgada, de tal manera que los casos que hayan sido decididos por los tribunales no podrán ser modificados.
En este sentido, aquellas entidades y clientes cuyas situaciones hayan sido resueltas por sentencia judiciales firmes no podrán ser modificadas.
Sin embargo, en paralelo y desde hace tres meses, la banca española aguarda con expectación la respuesta que debe dar la juez de lo Mercantil número 11 de Madrid a la macrodemanda interpuesta por 15.000 afectados por las cláusulas suelo, muy consciente de que probablemente decida eliminarlas.
Los expertos consideran que además la magistrada podría tener en cuenta ahora la opinión de la Comisión Europea y abogar por la retroactividad de las polémicas cláusulas suelo, en contra del criterio del Gobierno.
El pasado 24 de junio quedaba visto para sentencia el procedimiento abierto en 2010 a raíz de la demanda formulada por Adicae, que inicialmente se dirigió contra 101 entidades bancarias, que después quedaron en 35 fruto de los procesos de fusión.
De ellas, BBVA, Cajamar y Abanca, por la sentencia del Supremo y, posteriormente, Banesto y Barclays, dejaron de aplicar estos umbrales que impiden al hipotecado beneficiarse íntegramente de las rebajas del euríbor.
Al margen de estas entidades, otras como Bankia y CaixaBank han optado por eliminarlas de los préstamos hipotecarios de sus clientes, si bien otros bancos como Sabadell o Popular se resisten a hacerlo con el argumento de que ellos las vendieron correctamente.