Los alimentos han ido evolucionando a lo largo de la historia, entre las transformaciones más impresionantes se encuentran la de la piña, el melón o incluso la sandía, pero algo que nadie sabía es que la patata, hace 9 millones de años, era un tomate según un estudio publicado en la revista Cell, y que lideran científicos de la Academia China de Ciencias Agrícolas.
El estudio afirma que en el origen de la patata moderna, hace millones de años, se dio un cruce entre un ancestro del tomate y una planta silvestre parecida a la papa. Asumen que este cruce desencadenó la formación del tubérculo, la estructura subterránea agrandada que almacena los nutrientes presentes en plantas como las patatas.
Sanwen Huang, el investigador chino que lidera este estudio, explica que sus hallazgos, "muestran cómo un evento de hibridación entre especies puede desencadenar la evolución de nuevos rasgos, lo que permite que surjan aún más especies". Y celebra que al fin conocen el origen de la patata, que hasta ahora era un misterio.
Nuestros hallazgos muestran cómo un evento de hibridación entre especies puede desencadenar la evolución de nuevos rasgos, lo que permite que surjan aún más especies
Según este estudio, las plantas de patata modernas están más cerca del tomate que las de la papa que hay en Chile. Para defender esta hipótesis, el equipo de investigación de la Academia China de Ciencias Agrícolas, analizó 450 genomas de patatas cultivadas y 56 de especies de patatas silvestres, según explican desde la revista Cell.
Zhiyang Zhang asegura que "las patatas silvestres son muy difíciles de muestrear, por lo que este conjunto de datos representa la colección más completa de datos genómicos de patatas silvestres jamás analizada".
Aunque la planta primigenia de la papa y los tomates son especies distintas, el estudio explica que compartieron un antepasado común hace unos 14 millones de años. Por esto pudieron cruzarse y dieron lugar a las primeras plantas de patata con tubérculos hace unos 9 millones de años.
Para concluir, Huang explica que "la evolución del tubérculo dio a las patatas una gran ventaja en entornos hostiles, lo que impulsó una explosión de nuevas especies y contribuyó a la rica diversidad de patatas que vemos y de las que dependemos hoy en día".

