Condenados con competir lo que queda de temporada en la Europa League , por méritos propios y tras la primera gran decepción de la temporada. No se cumple ni el objetivo de mínimos en Europa. Acceder a los octavos de final. Cada vez el actual Barcelona está más lejos de la élite europea.
Llegados a este punto tratemos de sacar las conclusiones más positivas de esta nueva realidad que le toca vivir al Barcelona. Se foguearán los jóvenes . Irán creciendo y cogiendo experiencia en torneos internacionales. Que por cierto, no será fácil ganar por mucho que le coloquen el cartel de favorito al Barcelona.
Ya si la ganas las ventajas son enormes. Por supuesto las económicas, que servirían para compensar el enorme agujero que se le queda al presupuesto del club con esta temprana eliminación de la Champions League . Y deportivas muchas. Amén de la consecución de un título que en condiciones normales no competirá el Barcelona, el acceso directo a la Champions del año que viene, además como cabeza de serie , y la disputa añadida el verano del año que viene de la Supercopa de Europa frente al ganador de la Champions League se esta edición .
Algunos alicientes quedan por lo menos para tratar de competirla.
A la hora de buscar responsabilidades, es tan grande el batacazo para la institución que son muchos los culpables . Empezando por la gestión. Mucho que ver de la actual situación se debe a la negligente presidencia de Bartomeu que dejó el club muy tocado económicamente y con poco margen de maniobra. Laporta tampoco lo ha enderezado con lo que tiene buena parte también de responsabilidad. Apostó por alargar la agonía de Koeman y tardó en decidirse por Xavi.
Koeman no resolvió el papel de entrenador a la altura de la institución y Xavi de momento no ha podido dar con la tecla si bien es cierto que el apenas lleva un mes dirigiendo la nave.
Y los Jugadores. También y mucha responsabilidad. Basta ya de escudarse en la institución o en entrenadores. Están muy bien pagados y han hecho tocar fondo al Barcelona. Había plantilla suficiente para haber quedado por delante del Benfica , cuanto menos, en esta liguilla. El Bayern de Múnich era inalcanzable pero los lisboetas no pueden arrollar al Barcelona como lo hicieron e su estadio, por poner un ejemplo.
Esta es la nueva realidad del Barcelona y cuanto antes lo asimilemos menos sobresaltos nos llevaremos.