Hoy se juega una apasionante semifinal de la Liga de las Naciones de fútbol en el estadio de San Siro entre La vigente campeona de Europa, la Italia de Roberto Mancini y la no menos flamante semifinalista de la Eurocopa, la selección española de Luis Enrique Martínez. Solo han llegado cuatro aspirantes a este punto, estos dos y las poderosas Belgica y Francia, campeona del mundo que van por la otra parte del cuadro.
Fuera quedaron Alemania, vapuleada 6-0 por España, Inglaterra, Portugal entre otras muchas.
El éxito de llegar aquí ya es importante, estamos viviendo una época de transición en la que aún las nuevas generaciones no han tomado el relevo definitivo y deben ir imponiéndose con el paso de los partidos a la generación actual que además no ha tenido una trayectoria especialmente brillante. La presencia de los primeros jugadores subcampeones olímpicos, con cierta continuidad nos parece garantizar un futuro más halagüeño, pero como en todas las circunstancias de la vida ,hay que tener paciencia. Una paciencia que no es precisamente la gran virtud española en general ni de los aficionados al fútbol en particular.
Y en estás llegó la lista de Luis Enrique para el torneo de la Nations League. Una lista que no ha dejado indiferente a casi nadie y que fiel al estilo y la personalidad de nuestro seleccionador, ha generado polémica. La presencia del jovencísimo Gavi con solo 17 años ha sido lo mas contestado. Bueno su presencia y la ausencia de jugadores Del Real Madrid, más habitual en los últimos tiempos y que parece generar escozor en según que ambientes.
Hay que partir del hecho de que hay muchos jugadores, muchísimos, y muy importantes , lesionados. Sin ir más lejos los hombres de arriba Alvaro Morata, Gerard Moreno o Dani Olmo que bien podrían componer la delantera titular, o Pedri o tantos otros que incluso como Brais Mendez eran sustitutos de sustitutos y también cayeron lesionados. Vamos que no ha sido una lista fácil.
La presencia de Gavi me parece una anécdota en un grupo de 23 jugadores. Si no juega se irá curtiendo en la élite , a la que ha llegado no hace mucho. Y si lo hace y como lo viene haciendo en el actual Barcelona, seguro que no desentonará .
Lo que está muy claro es que nadie tira piedras contra su propio tejado y Luis Enrique tampoco.
