¿De quién es un camino? Esta es la cuestión que deberá dirimir un juzgado de León después de la denuncia interpuesta por un vecino de Rodillazo.
Para entender la cuestión, toca remontarse hasta el año 2008. Un particular compró entonces la propiedad conocida como Valle del Marqués en Rodillazo, pedanía perteneciente a Cármenes, poniendo fin así al uso libre y tradicional de dicho paraje.
El cambio de titularidad llevó al cierre del antiquísimo y tradicional camino entre Rodillazo y Correcillas, vía histórica de comunicación entre ambos pueblos.
En los diecisiete años transcurridos desde dicho cierre ninguna administración ha decidido emprender acciones legales para recuperar el camino, cuya titularidad pública viene avalada por decenas de pruebas que se remontan, al menos, al siglo XVIII.
Este vecino, asumiendo el coste, emprende esta lucha legal entendiendo que el caso es «particularmente grave» en una tierra «desprovista de latifundios y donde siempre ha imperado el respeto estricto a la propiedad privada y a la propiedad comunal».

