El Colegio Oficial de Médicos de Baleares defiende en Onda Cero el esfuerzo que llevan a cabo los sanitarios del archipiélago para hacerse entender con sus pacientes o en cualquiera que sea la lengua oficial con la que se dirigen a ellos en la consulta. Así ha valorado José Manuel Valverde la supuesta discriminación lingüística por parte de una doctora del centro de salud de Son Pizà de Palma hacia una paciente catalanoparlante. El doctor Valverde ha explicado que no existió ningún tipo de desencuentro y que "la polémica surgió por parte de una tercera persona" tras volver la paciente a su casa.
"La doctora de Son Pisà contestó a la paciente en castellano, la paciente habló en catalán y no hubo ningún desencuentro ni ningún problema, además se llevó el tratamiento y la paciente fue correctamente atendida", asegura el presidente del Comib tras consultar el caso. "El problema surge después en casa con la intervención de una tercera persona," explica el presidente del COMIB.
La polémica surgida para José Manuel Valverde se circunscribe "a un conflicto político" entre los miembros del Govern del Pacte que no se corresponde con la realidad. Según recuerda el presidente del Colegio Oficial de Médicos de Baleares, no debe existir discriminación lingüística hacia el catalán, pero los sanitarios no están obligados a utilizar esta lengua.
"Ningún sanitario va a ser expedientado por contestar en castellano a un paciente, el que quiera sacar más partido está complicando la historia," zanja el doctor Valverde.
El presidente del COMIB sostiene que la administración balear sigue priorizando el currículum de los sanitarios frente al conocimiento de la lengua catalana en la contratación del personal sanitario, lo cual sigue siendo un mérito y no un requisito para trabajar en Baleares.