Marina Moheno, coordinadora de l’Aliança per l’Aigua, ha destacado este miércoles en el programa radiofónico Más de Uno Ibiza y Formentera, ha hecho balance de la campaña de sensibilización “Menys plàstic, més aixeta” impulsada por la plataforma y el Consell d’Eivissa y ha insistido en que “el agua del grifo en Ibiza es potable y cumple con los controles sanitarios”.
Por ello, ha defendido la necesidad de cambiar la percepción social sobre el consumo de agua del grifo en la isla a través de acciones informativas, educativas y de concienciación ambiental que permitan “acercar a la ciudadanía datos reales y fiables sobre la calidad del agua que llega a sus hogares”.

En ese sentido, Moheno ha insistido en que, aunque es cierto que el sabor o la dureza del agua puede variar según la zona, “eso no significa que no sea apta para el consumo” y por ello ha recordado que “el uso de filtros o jarras de carbón activo puede ser una solución sencilla para quienes buscan mejorar el sabor sin recurrir al agua embotellada, cuyo impacto ambiental sigue siendo preocupante”.
Y finalmente, también ha señalado que el compromiso ciudadano con la sostenibilidad está creciendo, como demuestra el seguimiento de la campaña en redes sociales y la respuesta a las encuestas realizadas. “Nuestro objetivo ahora es seguir trabajando con las administraciones y con el sector privado para que el agua del grifo vuelva a tener el valor que merece en Ibiza”, ha concluido.
